Gilberto Valadez
Aguascalientes, Ags.- El 21 de agosto de 2012 inició la final de campeonato de la Liga Mexicana de Beisbol, denominada por los organizadores como la Serie del Rey, con dos protagonistas inéditos que no figuraban ni siquiera en la lista de los aficionados más optimistas.
Por un lado, los Rojos del Águila de Veracruz que había dado la sorpresa en el grupo de la Zona Sur, eliminando al campeón vigente Tigres de Quintana Roo, mientras que en el norte se presentaron los Rieleros de Aguascalientes, tras superar a los Sultanes de Monterrey y que, para entonces, ambos clubes eran del mismo propietario.
La final que se extendería al tope máximo de siete compromisos representaría, con el tiempo, la última ocasión que la llamada Máquina del Riel estuvo cerca de la gloria.
Cielo e infierno
Deporte tradicional en el estado durante el siglo pasado, el beisbol en Aguascalientes vivió su mejor noche el 9 de septiembre de 1978, cuando el Club Rieleros conquistó el campeonato de la Liga Mexicana, tras superar luego de cinco partidos al Unión Laguna.
Aunque después sumó nuevas campañas positivas durante los años ochenta, la novena local no conseguiría otro campeonato. Más aún, empezó una larga seguidilla de temporadas negativas hasta su primera desaparición tras el torneo de 1999.
La Máquina tuvo una segunda época con un retorno al circuito en 2004, pero el paso fue fugaz tras otra desaparición al finalizar la campaña de 2007. En ese periodo, apenas si alcanzaron a clasificar un par de torneos a la postemporada y sin mayor trascendencia. En 2006 incluso registraron el peor torneo de su trayectoria con un acumulado de 81 juegos perdidos.
Renacimiento
Apoyado por el gobierno priista de Carlos Lozano de la Torre y bajo el auspicio de empresarios de Monterrey, el beisbol profesional retornó para la competencia de 2012 y de nuevo con el nombre de Rieleros.
Malacostumbrados a malos torneos de la anterior época, los aficionados tuvieron sus reservas para la nueva época de la Máquina que sorprendería a propios y extraños con un aceptable torneo que les llevó a ser líderes momentáneos de la Zona Norte. El club encabezado por el manager Enrique Che Reyes, tuvo a peloteros como el catcher Carlos Rodríguez, que acabó como líder de cuadrangulares en la competencia regular, además del pitcher Humberto Montemayor que alcanzó la marca de más juegos ganados.
Avanzando como segundo lugar a playoffs, Rieleros eliminó en primera instancia a los Saraperos de Saltillo en cinco juegos. Luego en la final de zona, se enfrentó al Monterrey, en una serie que generó suspicacias por la relación empresarial entre ambas franquicias.
Aguascalientes ganó los tres primeros duelos, aunque luego se vio superado por los Sultanes en los dos siguientes, panorama que incrementó las dudas entre un sector de la afición. Sin embargo, cuando ya se daba por descontado el retorno de los antiguos Fantasmas Grises, el 19 de agosto la Máquina se impuso en el campo regio 9-6 a Monterrey para asegurar su boleto a la final por el campeonato.
El vuelo del Águila
La final sería contra el Águila de Veracruz, que previamente en su camino dio cuenta de Tabasco y Quintana Roo. La Serie del Rey iniciaría el martes 21 de agosto, en el estadio Beto Avila, del puerto jarocho.
En calidad de visitante, Aguascalientes emocionó a la distancia a sus aficionados ganando los dos primeros choques. 9-6 el inaugural y 4-3 el del día siguiente. No obstante, cuando la final se reanudó el viernes 24 en el parque Alberto Romo Chávez, de esta ciudad, los Rojos salieron avantes 6-1. El sábado 25 ganaron de nuevo apuradamente 7-6 para emparejar la contienda y forzar el regreso a Veracruz.
El quinto partido de la serie y último del año en el Romo Chávez se jugó el domingo 26 con triunfo de la Máquina en entradas adicionales por 6-5 para colocarse en la antesala de su primer título en más de 30 años.
No obstante, el Águila se impondría en los dos siguientes cotejos. El martes 28 dejaron tendidos en el terreno a Rieleros 3-2, y en el séptimo y definitivo duelo del miércoles 29, los locales apalearon 8-1 a la Máquina para quedarse con el título, que por cierto no ganaban desde el año 1970.
Los Rieleros se mantendrían durante la siguiente década en su sede el Romo Chávez, aunque ya no vivieron una campaña como la del 2012. En la actual de la Liga Mexicana, avanzaron a playoffs, pero quedaron eliminados dentro de la primera ronda.