Comunicado
Aguascalientes.- Personal de la Policía Ministerial del Estado llevaron a cabo el decomiso de mercancía de dudosa procedencia en un puesto de la línea de fuego ubicado en la colonia San Pablo, gracias a una denuncia que días antes había presentado una mujer, donde informaba que los amantes de lo ajeno habían sustraído algunos objetos de su vehículo producto de un robo tipo cristalazo.
En su reporte la afectada señaló que caminaba por la calle Marina Nacional cuando de manera repentina se detuvo en uno de los puestos semifijos que se instalan en el tianguis denominado la Línea de Fuego, llamándole la atención que los encargados del puesto vendían un monedero de color negro con vivos en blanco y una mochila de color negó con rojo y pequeños puntos en color blanco, con una imagen de Mimí Mouse.
Estos objetos los reconoció como de su propiedad y los cuales estaba denunciados ante el AMP, por lo que inmediatamente se comunicó vía telefónica con la guardia de agentes para informar lo descubierto; por su parte los agentes ministeriales le indicaron que no se moviera del lugar; arribando minutos después un grupo de investigadores quienes se entrevistaron con los encargados del puesto, quienes dijeron llamarse Luis Carlos y José Cristian.
Al ser cuestionados con relación a los objetos propiedad de la víctima de robo, ambos jóvenes señalaron que esos objetos los habían comprado a una persona en un tianguis que se instala los fines de semana en la colonia Insurgentes, y que ellos desconocían que fueran robados, del mismo modo los agentes observaron que también se vendían varios estéreos para automóvil, bocinas, amplificadores y demás objetos dando un total de 13 autoestéreo de diferentes marcas, 11 amplificadores, 3 ecualizadores, 3 modem propiedad de la empresa TELMEX, 2 pantallas, 1 DVD, 6 boofer, 6 bocinas y 9 cajones para bocina, por lo que se les pidió la documentación que acreditara la venta de dichos objetos.
La primera respuestas de los encargados del puesto fue que no contaban con dichos papeles, por lo que se tomó la decisión de que los objetos y los encargados fueran trasladados al edificio de Averiguaciones Previas y rendir su declaración de cómo habían adquirido la mercancía respectiva.
Ya a disposición del AMP Luis Carlos y José Cristian declararon que los objetos que ellos venden se los ofrecen personas que arriban al puesto, así como de algunos conocidos que llegan con los objetos por lo que no contaban con la documentación respectiva.
Finalmente el AMP abrió una averiguación previa y solicitó que la mercancía decomisada fuera depositada a la bodega de evidencias y esperar a que los posibles propietarios puedan reclamar sus objetos, mientras que los vendedores fueron dejados en libertad posterior a sus declaraciones.