Redacción
La Mona Lisa es, sin duda, uno de los trabajos más representativos de Leonardo da Vinci. Después de hace unos meses se desvelara si en ese cuadro su protagonismo sonreía o no, el científico francés Pascal Cotte ha arrojado un nuevo secreto que hasta el momento se desconocía de esta obra de arte.
Según Cotte, bajo la Mona Lisa se esconden otros dos retratos más, los cuales ha descubierto gracias a una técnica pionera llamada LAM (Método de Amplificación de Capa) que permite analizar capa por capa toda la estructura de la obra de arte.
El científico, miembro y cofundador de Lumiere- Technology, ha encontrado dos sombras, una de ellas correspondiente a una mujer con nariz y manos grandes y labios pequeños y otra con grabados de Leonardo y un toque de perlas.
“Ahora podemos analizar exactamente lo que pasa dentro de las capas de la pintura y se puede pelar como una cebolla todas las capas de la pintura. Podemos reconstruir toda la cronología de la creación de la pintura”, asegura Cotte, quien trabaja desde 2004, según asegura, en este minucioso estudio.
Eso sí, por el momento, desde el Museo del Louvre, lugar donde reside la obra, guardan silencio.