El Universal
Cd. De México.- El diputado Gerardo Salas Díaz asegura que la elección extraordinaria en el Distrito 1 de Aguascalientes, luego de que el Tribuna Electoral del Poder Judicial de la Federación anulara los comicios del pasado 7 de junio, por la intervención del gobierno estatal, demuestra la urgente necesidad de modificar la norma electoral, ya que no se puede dejar impune a quien de manera arbitraria viola las leyes.
“Se anuló una elección y nadie ha pagado por ello, una falta tan grave y todavía no hay un culpable ni una sanción”, dijo Salas, quien afirma que desde la Cámara de Diputados pugnará para revertir este tipo de prácticas que malbaratan la política y ponen en riesgo la credibilidad de las instituciones.
El criador de toros de lidia y de caballos cuarto de milla dice que aun cuando cree que los partidos políticos son los culpables de que la sociedad ya no crea en ellos y prefiera sumarse a los independientes, en breve se integrará a las filas del PAN, toda vez que compitió bajo la figura de candidato ciudadano y confía en que la fuerza política logrará una regeneración.
En entrevista con EL UNIVERSAL, agrega que su triunfo —producto de la coalición entre el PAN y Nueva Alianza— es la antesala de lo que ocurrirá este año en la elección por la gubernatura de Aguascalientes, siempre y cuando, señala, Acción Nacional cuide la unidad que demostró en la contienda extraordinaria.
¿Qué tan difícil fue llegar es ser el diputado 500?
—Fue difícil tras la anulación de la elección del 7 de junio, sobre todo por la causa, donde un partido acude a la vieja guardia o al viejo estilo, hace un fraude con elementos que comprueban el protagonismo del gobernador de Aguascalientes [Carlos Lozano de la Torre] y de su equipo. Ocurrió algo histórico, pocas veces se anula una elección federal, y para Aguascalientes es la primera elección que se anula en su historia.
Lo que nos lleva a decir que las cosas pueden suceder, porque durante ese tiempo había gente que te dice: ‘No se va anular, es imposible’, y cuando ves que todo va avanzando, entonces no te puedes detener.
Yo fui un candidato ciudadano, no soy militante del Partido Acción Nacional. Luchamos contra todo: en la primera elección tuve más de 32 mil votos, en la segunda más de 49 mil votos, esto habla de que las cosas se hicieron bien, pero sobre todo que la ciudadanía quiere estar en el centro de la toma de decisiones.
¿Recibió amenazas del gobierno del estado?
—El partido en el poder, que es el PRI, volvió a echar todos los recursos para comprar votos y seguir amenazando. En el proceso electoral extraordinario vimos a la policía estatal amenazando, una fuerte presencia del mando único enfocado en contra de nuestro partido para que nuestra gente estuviera intimidada, pero el resultado estuvo claro: Se tuvo un triunfo de casi 10 mil votos, que dejó lejos cualquier duda y dejó claro que la ciudadanía debe mandar en todos los procesos electorales.
Directamente yo no recibí, pero desde que salía de casa siempre había una patrulla o una ministerial siguiéndome, afortunadamente nunca tuvimos una agresión física, pero sí hubo intimidación, te mandan mensajes, yo creo que eso ya debe quedar en el pasado. Mi gente encontraba ponchadas las llantas de sus coches o los amenazaban para asustarlos, lo que habla de un gobierno estatal desesperado.
¿Por qué ser diputado?
—Yo fui director general de la Comisión para el Desarrollo Agropecuario en Aguascalientes [durante la administración de Luis Armando Reynoso Femat], y cuando ves que para que las cosas se cambien tienes que entrarle con mucha decisión, fue algo que me movía. Anular la elección mandó una señal al país de que los ciudadanos pueden hacer más que el poder y la intransigencia de los gobiernos, porque los gobiernos ya perdieron la capacidad de generar confianza a través de hechos y quieren imponerse y comprar voluntades, eso debe quedar en el pasado.
Los partido debemos darnos cuenta que tenemos que generar confianza, porque aunque vengas como ciudadano al momento en que decides entrar a la vida política ya te pusiste muchas etiquetas que no son tuyas y tienes que tratar de dignificar.
¿Es difícil ser candidato ciudadano con un partido opositor en el gobierno?
—Es como la lucha de David y Goliat. Hasta ahora el gobierno del estado actúa como si no hubieran cometido ninguna falta, eso es algo muy triste, pues se anuló una elección y nadie ha pagado por ello, una falta tan grave y todavía no hay un culpable ni una sanción, eso ha quedado impune, y eso se tendrá que reforzar ahora que ya estamos en la Legislatura.
¿Pensó en tirar la toalla?
—Yo soy gente de campo, me debo al sector agropecuario, somos de Aguascalientes, soy muy cercano a la gente, a mí me gusta mucho estar con ellos, cuando uno está ahí y les ves las ganas de salir adelante, es cuando vale la pena luchar, y definitivamente vamos a luchar.
¿Cuál será su agenda legislativa?
—El campo se debe poner primero en un lugar donde se le dé la justa importancia, la parte de la producción de alimentos, sobre todo cuando no ha sido una prioridad para el gobierno federal, a pesar de que ellos hablan de que le apostaban al campo.
¿Se afiliará al PAN o seguirá como ciudadano?
—Yo estoy con el PAN porque hay mucha similitud conmigo. Me daría gusto pertenecer al PAN y contribuir a quitar las manchas que tiene.