Redacción
Aguascalientes.- Los tres sujetos implicados en la ejecución de un vendedor de autos usados y de las lesiones provocadas a otro comerciante, ya recibieron el auto de formal prisión y a partir de este momento enfrentan un proceso penal por los delitos de homicidio doloso calificado con las agravantes de premeditación, alevosía y ventaja; también por el delito de lesiones dolosas con las misma calificativas y delitos contra la salud.
Los procesados son Jonathan Eduardo de 23 años, originario de Guatemala y con domicilio en Zacatecas. Rubén Alejandro de 38 años y ocupación taxista, originario de Aguascalientes, y el menor de edad Fernando José de 16 años y domicilio en Villa de las Palmas en esta ciudad. Por cierto, este último recluido en el CEDA.
A los tres, la Fiscalía los señala como los probables responsables de haber asesinado al vendedor de autos usados Alejandro Araiza Hernández, propietario del negocio de razón social “Xaris Autos” que se ubica sobre av Aguascalientes casi esquina con la calle Fortunato Maycote en el Fraccionamiento Versalles, y de las lesiones al también comerciante Omar García Ruiz de 34 años.
La detención se registró el mismo lunes 15 de Febrero minutos después de la ejecución, ya que testigos señalaron haber observado un taxi blanco con número económico 3390 desde donde salieron los disparos.
La unidad de alquiler fue localizada por la salida a Calvillo a la altura de la empresa Valle Redondo en donde se llevó a cabo la detención de los 3 sospechosos, el aseguramiento de un arma calibre 45, tres teléfonos celulares y varios envoltorios de drogas.
De las declaraciones de los detenidos, la más contundente es la del guatemalteco Jonathan Eduardo, quien señaló que el cruzó por nuestro país buscando llegar a Estados Unidos, pero el autobús en el que viajaba fue secuestrado por integrantes de un grupo delictivo.
Dijo que lo trasladaron a la ciudad de Guadalajara en donde lo reclutaron para formar parte de un grupo delictivo y posteriormente lo trasladaron a Tlaltenango Zacatecas para ser capacitado en el manejo de armas de fuego y en la venta de drogas en aquella entidad.
También confesó que llegó a Aguascalientes el 14 de febrero con la orden expresa de ejecutar a los vendedores de autos, ya que formaban parte de un bando contrario del crimen organizado.
Ese mismo lunes 15 de Febrero conoció al taxista y al menor de edad, y los convenció de que le ayudaran a ejecutar a los comerciantes y les pagaría por su apoyo. Los dos aceptaron y hoy enfrentan al igual que el guatemalteco, un proceso penal por delitos que son considerados como graves y que no admiten el beneficio de la libertad mediante el pago de una fianza.