Sin Embargo
Ciudad de México.– Senadores de oposición acusaron que el Gobierno federal pretende esperar hasta las elecciones del 5 de junio para anunciar cómo subsanará el vacío de ingresos que Petróleos Mexicanos (Pemex) dejará por el déficit de producción. Los legisladores prevén que las salidas más viables, de acuerdo con la estrategia que ha seguido la actual administración, sean contratar más deuda pública y aumentarle los impuestos a la población.
En el reciente informe de la Empresa Productiva del Estado enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) se constató que Pemex sufrió en el 2015 pérdidas netas de 151 mil millones de pesos, una situación que pone en aprietos casi el 30 por ciento de los ingresos de la Federación, que aporta la petrolera mexicana y que por décadas ha significado un aporte seguro para el Gobierno federal.
“El Gobierno lo que está haciendo es cuidarse en salud mientras espera al proceso electoral del próximo 5 de junio, usa de manera artificial todo el contexto de coberturas y, seguramente, podríamos estar viendo un nuevo recorte después de que pase el proceso electoral. Yo no descarto que incluso quieran un planteamiento de impuestos adicional hacia 2017”, dijo el Senador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Armando Ríos Piter.
Hasta ahora el Gobierno federal logró mitigar la volatilidad de los precios del petróleo, y el descenso en la producción de Pemex, que de acuerdo con legisladores del Partido Acción Nacional (PAN) era de 300 mil barriles de petróleo más por día en el comienzo del actual sexenio, mediante los recursos de la reforma fiscal.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público aseguró en su cuarto informe del año pasado que los ingresos totales fueron de 4 billones 264 mil millones de pesos, de los cuales aproximadamente la mitad fueron aportados por los impuestos. Por encima, también, de los ingresos petroleros que ascendieron el año pasado a 841 mil 518 millones de pesos.
Por su parte, Manuel Bartlett Díaz, Senador del Partido del Trabajo (PT), explicó que lo más probable es que el Gobierno amplíe la adquisición de deuda, antes que aumentar más impuestos a la ciudadanía.
“Dicen que no habrá más impuestos [el Gobierno], y lo que están haciendo es endeudando al país. Pero la deuda es más de la mitad del PIB [Producto Interno Bruto], y es una locura tapar todo contratando pasivos. Entonces, en los dos años y medio que les quedan, no creo que vayan más allá de seguir endeudando y dejar al país en la quiebra”, consideró.
El legislador expresó que en México la deuda pública pasó de 38 al 47 por ciento del PIB durante los primeros tres años de la administración del Presidente Enrique Peña Nieto.
MEDIDAS FALLIDAS
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Los senadores del PRD recordaron que los efectos de la Reforma Energética se adelantaron debido a la crisis que sufren los precios internacionales del barril de petróleo – que en el caso de la mezcla mexicana ha registrado un desplome de más de 100 dólares por barril desde 2008 a la fecha-, y será la iniciativa privada que compite contra Pemex, la principal beneficiada con el ahogamiento de la antigua paraestatal.
“El tercer trimestre del 2015 es muy ilustrativo, porque cuando una empresa cualquiera presenta déficit entonces se actúa para que este déficit se subsane y se normalicen las finanzas de la empresa. Y prácticamente la deja al cierre del 2015 con un déficit de 352 mil millones de pesos, ahora que se anuncia un recorte de otros 100 mil millones de pesos es con toda intención de quebrarla”, detalló la Senadora del PRD, Dolores Padierna Luna.
Este lunes el nuevo director de Pemex, José Antonio González Anaya, refirió que, de los 100 mil millones de pesos retirados a la empresa al servicio del Estado como parte de ajuste presupuesta del Gobierno federal, serán 46 mil 800 millones de pesos los que se resten a Pemex Exploración y Producción (PEP).
“Desde que comenzó la Reforma Energética le quitaron los principales yacimientos petroleros [a Pemex], en la Reforma Energética se plantea que de exploración sólo tendrá tres años, con posibilidades a dos años más. Eso evidentemente, ya no fue. Le están quitando todo el recurso de inversión, las tareas de exploración son muy caras, es en promedio de 19 dólares cada barril”, dijo Padierna.
De acuerdo con la integrante de la Comisión de Energía, de no haber mayor inversión en el PEP tampoco habrá una mejoría en la producción.
El reciente informe de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) sobre la Cuenta Pública 2014 refirió que hubo déficits de hasta un 68.6 por ciento en la meta de perforación de pozos prevista, además del abandono de proyectos de extracción de gas shale.
Otro riesgo de las finanzas de Pemex está en el pasivo laboral de sus trabajadores que asciende a un billón 474 millones 008 mil 528 pesos, es decir el 8.4 por ciento del PIB del país, de acuerdo con datos de la ASF.
“Los pasivos laborales no deberían de existir, porque se tienen una plantilla controlada y hay un fondo para pagar pasivos laborales. Me refiero a las pensiones y jubilaciones con muy malos manejos”, dijo la Senadora Padierna.
La ASF reconoció en agosto del año pasado que la deuda que tiene Pemex se debe al sistema de pensiones que actualmente maneja, pese a que éstas hayan sido absorbidas por el Estado desde el 2014, tras la aprobación de la Reforma Energética en la que se hizo el compromiso de convertir el pasivo laboral en deuda pública a condición de una Reforma Laboral en el sector.
“Han acusado a Pemex de tener demasiado personal, pero hemos demostrado que ese personal no era excesivo. Porque ha sido una empresa eficiente. Sin embargo, ahora la han ido matando, metiendo a empresas extranjeras a cubrir funciones de Pemex, y que sea más bien una dadora de contratos. Y ese camino no va cambiar”, dijo Bartlett.
Por otro lado, medios como el británico The Financial Times, calificaron el pasado 26 de febrero, que hay una situación de “hinchamiento” en Pemex, al comparar que la empresa al servicio del Estado contaba con 153 mil 85 empleados al término del 2014, una proporción siete veces mayor que la que tiene la compañía estatal noruega Statoil, y un tercio más que los de compañías privadas como ExxonMobil, Shell o BP.
REFORMA ENERGÉTICA
El Partido Acción Nacional ha dicho que la reforma energética sí dio todos los instrumentos al Gobierno para detonar la producción petrolera en México, pero que fue la actual administración del Presidente Enrique Peña Nieto la que no supo valerse de la reforma.
“Yo creo que lo que hemos estado viendo es un nuevo cuerpo directivo, que está poniendo orden en lo que fue una mala administración en los primeros tres años de este Gobierno. Pemex está en una situación muy complicada, empezó a desbarrancarse hace un par de años. A mí me parece que también es una decisión de empresa razonable el dejar de extraer petróleo cuyo precio de extracción es mayor que el precio internacional de venta”, dijo el Senador panista y ex Secretario de Hacienda, Ernesto Cordero Arroyo.
De acuerdo con Cordero Arroyo, quien fue uno de los operadores a favor de la Reforma Energética en la Cámara Alta, la falta de inversión en México es generalizada en el contexto internacional, sin embargo, el descenso de los precios del petróleo aún no ha llegado a su punto más bajo.
“Estúpidamente pensaban que si vas matando poco a poco a Pemex, y su forma de sostener el presupuesto nacional, las empresas internacionales iban a sustituir lo que aporta Pemex, mediante impuestos, pero eso no es racional. Es lo que menos les importaba. Sino el apoyo de los Estados Unidos, y la oligarquía, fue un salto al vacío y traicionaron a la Patria”, dijo el Senador Barttlet sobre los efectos de esta reforma energética.
Hace una semana la empresa al servicio del Estado estimó que le llevaría un plazo de hasta nueve años poder subsanar el saldo negativo de la utilidad neta, que ahora se ubica en un billón 192 mil millones de pesos.