Excelsior
Berlín.- La excanciller mexicana Patricia Espinosa, actual embajadora de México en Berlín, ha sido nominada por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, para liderar la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), con sede en Bonn (Alemania).
En un comunicado, este organismo explica que Ban Ki-moon ha concluido el proceso de selección con la elección de Espinosa, lo que abre un proceso de consultas que conducirá a la ratificación definitiva del nombramiento.
La diplomática mexicana estuvo encargada de la Cumbre sobre Cambio Climático de la ONU realizada en 2010 en la ciudad de Cancún (COP16)
De acuerdo con un mensaje difundido en la cuenta de Twitter de la actual secretaria ejecutiva de la CMNUCC, la diplomática costarricense Christiana Figueres, las consultas con el consejo de este organismo para aceptar la nominación de Espinosa ya iniciaron.
Espinosa sustituirá como secretaria ejecutiva de la CMNUCC a la costarricense.
La excanciller de México era una de los diez candidatos barajados por la ONU para asumir el puesto de jefe de la diplomacia climática internacional.
Nacida en Ciudad de México en 1958, Espinosa ingresó en el Servicio Exterior Mexicano en 1981 y su primer destino dentro de la carrera diplomática fue el de agregada de Economía de la Misión de México ante las Naciones Unidas con sede en Ginebra.
Tras ocupar diversos cargos en misiones diplomáticas mexicanas, en 2001 llega a Alemania como embajadora para ser nombrada en junio de 2002 representante de su país ante Austria, Eslovaquia y los Organismos Internacionales con sede en Viena.
Dejó estos últimos destinos a finales de 2006, momento en el que el entonces presidente de México Felipe Calderón la puso al frente de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Tras seis años en el cargo, en 2013 Patricia Espinosa regresó a Berlín como embajadora de su país.
Ahora, Espinosa deberá asegurar que los compromisos de financiamiento para implementar los acuerdos sobre cambio climático sean cumplidos, además de crear los mecanismos de seguimiento para que los países concreten sus planes de reducción de contaminantes.
Asimismo, la excanciller deberá liderar el proceso de ajustes del Acuerdo de París y de los compromisos nacionales de cada país, con el fin de que se cumpla la meta de un aumento en la temperatura global no mayor de dos grados centígrados durante este siglo.
dgp