El Financiero
Patrick Murphy, socio del bufete de abogados Corboy & Demetrio confirmó que 16 pasajeros interpusieron a la fecha seis demandas en contra de Aeroméxico, tras el accidente que sufrió en el aeropuerto de Durango una de sus aeronaves, que transportaba a 103 personas a bordo y que tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia.
En entrevista, el abogado anticipó que es posible que en los próximos días crezca el número de demandas.
“El propósito de las demandas judiciales es obtener una orden de protección -que ya tenemos del juez John Callahan-, para preservar información crítica, que contestará las preguntas de: ¿por qué este avión despegó, por qué no alcanzó la velocidad y altitud de despegue y por qué se desplomó?
¿Además de conocer si el piloto contaba con la información necesaria antes de despegar, también sería importante saber la información con la que contaba el controlador del tráfico aéreo, la aerolínea y qué tanta información le proporcionó al piloto?
 Hemos encontrado que todos (los pasajeros) estaban aterrorizados cuando el avión intentaba despegar, rebotó en la pista y eventualmente se estrelló en tierra, empezó a quemarse el fuselaje, la cabina se llenó de humo negro, con lo que la gente no podía ver sus manos enfrente de su cara, era difícil respirar. Así que primero sintieron “sobreviví a un accidente y luego pensaron ahora voy a morir en un incendio” así que todos quieren saber si fue la decisión correcta despegar en esa fuerte tormenta. El avión en sí se estaba sacudiendo por el viento severo, había lluvia torrencial. Nosotros queremos averiguar qué sabía el piloto, si sabía de antemano cuáles eran las condiciones severas del clima. Se supone que los pilotos deben ser capaces de despegar y considerar los factores climatológicos, pero necesitamos preservar y proteger esa información y ese es el objetivo de la orden de protección.

¿Se trata de una demanda colectiva?
 No, porque las afectaciones en cada pasajero son únicas, por lo que va a haber múltiples demandas legales. En la mayoría de los casos, los daños emocionales serán más graves que los físicos y probablemente serán permanentes. Los daños están divididos básicamente en dos categorías: los daños físicos, huesos rotos, quemaduras en el cuerpo, lesiones en tejidos blandos, cosas de esa naturaleza. La otra categoría son los daños emocionales y eso es por el miedo de que iban a morir, trastorno del estrés postraumático, que todas estas personas van a desarrollar.
 ¿Tienen ya un estimado de cuánto será la compensación económica que pedirán a Aeroméxico por cada pasajero?
 No podemos especular en una cantidad, porque hasta el momento no sabemos la gravedad de los daños físicos, ni emocionales, pero en otros casos de este tipo se han tenido que pagar montos bastante significativos.
 ¿Qué tan común han sido accidentes de este tipo en vuelos comerciales últimamente?
 La seguridad en la aviación comercial ha sido tan buena en los últimos años, que por eso tan importante conocer las causas del accidente. Las aerolíneas comerciales han tenido una tremenda tasa de éxito y seguridad desde básicamente 1999, desde el vuelo de United 232 que se estrelló en la ciudad de Sioux en Iowa, ha habido muy pocos accidentes aéreos significativos.
 ¿Ya han recibido comentarios de Aeroméxico y con la experiencia de casos así qué tanto puede afectar a la aerolínea un incidente de esta naturaleza?
 No. Estamos en espera, pero ellos tienen tiempo para responder tanto legal como profesionalmente. Al ser la seguridad algo crucial en las aerolíneas, seguramente Aeroméxico y Aeroméxico Connect se encargarán de que en el futuro los despegues durante lluvias torrenciales se retrasen o se hagan adecuadamente.
El despacho recordó que en 1989 alcanzaron un acuerdo récord de25 millones de dólares para la familia de un empresario que murió en el aterrizaje forzoso del vuelo 232 de United Airlines en Sioux City, Iowa. 121 pasajeros murieron y muchos resultaron heridos. De 39 casos del accidente que llevaron, aseguraron 73.9 millones de dólares en daños y perjuicios.