Excélsior
Ciudad de México.- Crímenes horrorosos ocurren cada día alrededor del mundo, recientemente se dio a conocer que la Corte Superior de Ontario en Canadá, declaró culpable de parricidio ‘planeado y deliberado’ a Dellen Millard.
Al morir su padre, el joven se convertiría en el heredero único de un impero multimillonario, por lo que decidió asesinarlo el 29 de noviembre de 2012.
De primera instancia se creyó que Wayne Millard, propietario de la erolínea Millardair, se había suicidado a los 71 años cuando lo encontraron muerto en su cama con un disparo en la cabeza.
El condenado en aquel momento aseguró que su padre sufría de depresión y alcoholismo. Posteriormente, una investigación determinó que Dellen le había disparado en el ojo izquierdo mientras dormía.
Aunque el joven alegó que se encontraba en casa de su amigo Mark Smich la noche de los hechos, su teléfono confirmó que había visitado la casa de su papá esa fatídica noche.
De igual manera, trascendió que el acusado compró de manera ilegal el arma con la que mataron a su padre, una pistola que tenía su ADN.
Según información de Standard, se trata de la tercera condena por asesinato para Dellen Millard, quien ya cumplía cadena perpetua condena sin posibilidad de libertad condicional por 50 años por haber acabado con la vida de su exnovia Laura Babcock —quien falleció cuatro meses antes que su padre— y por la muerte de Tim Bosma, que se produjo seis meses después del parricidio.
El próximo 16 de noviembre se conocerá la condena por este crimen.