Redacción
La popularidad de aplicaciones móviles como Instagram en estos últimos años ha llevado a cierto tipo de tendencias fotográficas, como las selfies con animales. La plataforma social está repleta de millones de fotos de usuarios con tigres, leones, jirafas, elefantes, rinoceronces y muchos otros animales silvestres.
Si bien se trata de fotografías “asombrosas” que suelen generar numerosos ‘me gusta’ y comentarios, es fundamental tener en cuenta el bienestar de los animales. Según señala la antropóloga biológica Tracie McKinney, profesora de la Universidad de South Wales, no hay el conocimiento suficiente sobre el comportamiento animal, lo que hace que las personas interpreten equivocadamente los distintos signos de maltrato o sufrimiento.
No necesariamente quiere decir que es indebido hacerte fotografías con los animales de los santuarios o las reservas naturales. McKinney recomienda tomar algunas medidas que te permitirán obtener las fotos que desees, pero con responsabilidad.
1. TRATA DE TOMAR SOLO FOTOS DE ANIMALES QUE HABITEN EN SU AMBIENTE NATURAL
La experta asegura que las especies usadas para las fotos de turistas rara vez viven en condiciones favorables, y que la mayoría ocupan entornos que difieren demasiado de los que habitarían en la naturaleza. Por ejemplo, es común que en países centroamericanos y sudamericanos sean ofrecidos ejemplares de perezosos bayos para fotos. Sin embargo, la gente desconoce que los animales sufren cuando les mueven sus brazos o cabeza para hacer una foto mejor.
Así entonces, trata solo hacerte fotos con animales que estén en su entorno natural. Evita tocarlos, conserva una distancia segura y cerciórate de que el animal cuenta con el espacio suficiente para moverse e irse cuando quiera.
2. NO ALIMENTES A LOS ANIMALES
Luego de fotografiarte con un animal, quizá sientas tanta emoción y gratitud que quieras darle de comer. A pesar de tus buenas intenciones, por favor no lo hagas, es una pésima idea. De acuerdo con la profesora McKinney, compartir alimentos o solo el hecho de acercarte mucho aumenta el riesgo de contagio de enfermedades entre personas y animales. Algunos simios como orangutanes, chimpancés y gorilas, por ejemplo, son susceptibles a una serie de infecciones humanas, entre ellas resfriados y gripes, sarampión, tuberculosis y neumonía.
Igualmente, alimentar a los animales también puede causarles un impacto negativo en su salud y conducta. En 2017 un grupo de macacos de cola larga se hizo popular en Bali (Indonesia) por robar artículos de todo tipo a los turistas para luego devolverlos a cambio de comida.
3. CONSULTA EL COMPORTAMIENTO TÍPICO DE LAS ESPECIES ANTES DE TU VISITA
Como se dijo al principio de este artículo, existe un desconocimiento acerca de lo que significa el comportamiento de los animales. Lo mejor que se te puede ocurrir es obtener información sobre los animales con los que te encontrarás en tu recorrido. Esto ayudará a evitar conflictos, además de posibles rasguños y mordidas, porque aprenderás a detectar las señales que muestren los animales. Al documentarte previamente también podrás reconocer las situaciones de abuso o maltrato y así tomar las medidas del caso.
4. RESPALDA LAS ECONOMÍAS LOCALES
Proteger la vida silvestre es algo que podemos hacer solo si protegemos a sus comunidades, y estas comunidades incluyen a las personas. McKinney recomienda respaldar a las economías locales procurando proporcionar fondos tanto para las personas como para los animales que viven en esos entornos.
Así que, antes de hospedarte en un hotel internacional, quédate en uno local y opta por la comida del lugar que visitas. En países como Tanzania y Costa Rica, por ejemplo, el turismo de vida silvestre crea empleos sostenibles y bien remunerados para la población local, lo que hace que los entornos naturales puedan ser adecuadamente protegidos.
5. NO VISITES SITIOS DONDE MALTRATEN A LOS ANIMALES
Para terminar, ten claro que el dinero de los turistas tiene mucho poder. Así que, si hay algo que puedes hacer por los animales es no ir a las reservas o santuarios que aún participan en prácticas poco éticas. Además, utiliza tus redes para divulgar y no recomendar la visita a este tipo de establecimientos.
Fotografiarte con un animal puede ser un bonito recuerdo, pero será aún más valioso si lo haces con responsabilidad, teniendo en cuenta el bienestar de la criatura.
Con información de Grandes Medios