Estas 5 marcas Profeco las tacha de corrientes

Redacción

Ciudad de México.-La moda es una parte indispensable de nuestras vidas y es que como lo explicó Miranda Priestly en “El diablo viste a la moda”, incluso si no se está interesado por esta industria, al llevar las prendas que nos gustan formamos parte de ella, ya sea de la forma más glamurosa o con el estilo más sencillo. Prueba de ello es que todos tenemos un clóset surtido con diferentes tipos de ropa y marcas; sin embargo, puede que entre esta colección de prendas existan algunas de mala calidad y en las que no vale la pena invertir, pero a las que muchas personas acceden por desconocimiento. 

Existe una larga lista de marcas que venden ropa “chafa” y que son reconocidas a nivel mundial por ser las mayores impulsoras de la industria, además que cada temporada presumen las nuevas tendencias que nadie se puede perder o que sus precios resultan muy accesibles para gran parte de la población. Entre ellas no sólo destacan aquellas de venta online, sino también las que encontramos en cada plaza comercial y cuyos diseños son conocidos como fast fashion. Es por ello que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha alertado a la población para dejar de invertir en ellas o hacerlo de forma cuidadosa y responsable tanto con tu bolsillo como con el medio ambiente. https://5619442c888c5366dd66d20d5de5f790.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-40/html/container.html?n=0

Toma en cuenta las recomendaciones de la Profeco en tus próximas compras. (Foto: Pexels)

Las 5 marcas de ropa de “mala calidad” 

  • Bershka
  • Guess
  • H&M
  • Stradivarius
  • Zara

De acuerdo con la Profeco, además del listado anterior, existen al menos 45 marcas de ropa de venta en México y en otras partes del mundo que no son las ideales para consumir ya que los materiales con las que están hechas son considerados como de una mala calidad, incluyendo a firmas como Shein, y por lo tanto potencian a que el tiempo de uso de cada diseño sea de unos cuantos meses, cuando en décadas pasadas se acostumbraba a que duraran por años. De ahí que no sea sorpresa que muchas generaciones crecieron con ropa heredada de sus familiares. 

Una de las grandes recomendaciones de la institución para sustituir estas marcas es considerar este último aspecto, pues según explican, resulta más conveniente hacer compras en las marcas con precios un poco más elevados, pero que sus prendas son de mejor calidad que gastar en marcas que al cabo de unas puestas terminarán por dañarse y más tarde desecharse debido a los materiales “chafas” que se utilizan”. 

Estos materiales reducen la calidad y tiempo de vida de tu ropa 

Por supuesto, al tratarse de marcas de renombre y de fácil acceso por sus precios accesibles es difícil no tener una o varias de ellas en los básicos del guardarropa; sin embargo, pueden llegar a considerarse como una mala inversión y de ahí que la recomendación sea no comprarla. Entre los aspectos que Profeco destaca se encuentran los sociales, que incluyen las precarias condiciones en las que trabajan los empleados y los sueldos mínimos que reciben, eso sin contar que el tiempo de la vida de la ropa puede verse reducida por materiales “corrientes”. 

A pesar de ello, siempre se puede invertir de forma consciente y no sólo dejando se llevar por las tendencias de cada temporada, es decir, primavera-verano u otoño-invierno y para ello basta con prestar atención a los materiales de cada prenda, pues según especifican las autoridades, la gran mayoría recurre a textiles baratos como:

  • Fibras sintéticas
  • Poliéster
  • Nylon
  • Rayón
  • Acrílico
¿Y tú revisas los materiales? (Foto: Pexels)

Algo que preocupa de estos textiles es que no son sustentables, pues provienen del petróleo y además son los mismos materiales con los que se fabrican envases desechables, pero en el mundo de la moda se les da forma de hilos o bloques sólidos con los cuales crear cada prenda. ¿Te imaginas llevarlos a tu piel?, es por ello que la recomendación es no invertir en piezas como estas y en lugar optar por alternativas más naturales e incluso amigables con el medio ambiente y es que incluso la ropa “chafa” puede tener el mismo impacto que un popote de plástico, un objeto que millones de personas han dejado de usar en los últimos años. 

“Al tener tanta ropa basura que es muy difícil reutilizar o darle otro ciclo de uso, ésta llega a los basureros y, comparado con las botellas, popotes o platos desechables, pues la historia de la huella medioambiental es la misma”, advierte la Profeco. 

H&M o Zara no son las únicas marcas de baja calidad; conoce la lista entera

Según explicó la dependencia en una publicación de 2019, la “ropa bonita” y en tendencia muchas veces tiene desventajas, en especial para los consumidores, pues es común encontrar que las prendas por ser baratas y de baja calidad dejen “de servir cada vez más rápido”. 

La ropa “chafa” también tiene un impacto ambiental. (Foto: Pexels)

Así que la próxima vez que vayas de compras, en especial en las compras para la próxima temporada navideña, lo ideal es no sólo voltear a ver los materiales con los que cada diseño está confeccionado, sino también a marcas de renombre y que a pesar de ello no se libran de vender piezas de baja calidad. Sobre ello, Profeco advierte que la lista incluye a:

  • Bershka
  • Bestseller
  • Boohoo.com
  • C&A
  • Charlotte Russe
  • Cotton On
  • Esprit
  • Fashion Nova
  • FIVE FOXes
  • Forever 21
  • Gap Inc
  • Giordano
  • Guess
  • H&M
  • Mango
  • Massimo Dutti
  • Metersbonwe
  • Missguided
  • Miss Selfridge
  • Nasty Gal
  • New Look
  • New Yorker
  • Next
  • Oysho
  • Peacocks
  • PrettyLittleThing
  • Primark
  • Pull & Bear
  • Rainbow Shops
  • Renner
  • Riachuelo
  • River Island
  • Romwe
  • S. Oliver
  • Shasa
  • SheIn
  • Stradivarius
  • Topshop
  • United Colors of Benetton
  • Uniqlo
  • Uterqüe
  • UrbanOutfitters
  • Victoria’s Secret
  • Zaful
  • Zara
Millones aman gastar en ropa nueva. Foto: Pixabay

¿Qué son las marcas fast fashion y cómo funciona esta industria?

Profeco explica que la industria de la ‘moda rápida’ utiliza materiales de baja calidad para reducir costos. Así, pueden vender las prendas muy baratas, de forma que salen rápidamente de los anaqueles. En vez de resurtir los modelos agotados, las firmas lanzan nuevos diseños. Esto hace que el tiempo de vida de una colección sea de unas 6 semanas, en contraste con los 6 meses que duraban las temporadas primavera/verano y otoño/invierno.

En su mayoría, los textiles usados son fibras sintéticas derivadas del petróleo: poliéster, nylon, rayón o acrílico, entre otros. Estos materiales tienden a desgastarse rápidamente: el color se deslava, pierden la forma, se llenan de pelusa y hasta se descosen o rompen en las primeras puestas. El constante cambio en las tendencias de moda y la poca durabilidad de la ropa, provocan que sea desechada más pronto. El análisis señala que las personas prefieren comprar prendas nuevas, con diseños más actuales y a bajo costo, que reparar una dañada.

Foto: Pixabay

Por supuesto, el auge del ecommerce ha facilitado el acceso a las tiendas de fast fashion online, y ahora puedes renovar todo tu guardarropa con un par de clics. Como consecuencia, los consumidores se están volviendo “adictos” a las compras. A la par, debido a su carácter sintético, estas prendas tardan muchísimos años en biodegradarse, prácticamente lo mismo que cualquier botella de plástico. Esto provoca un alto impacto ambiental en un período muy corto. 

Los mexicanos compran más ropa de China

Con el aumento de las compras en línea, cada vez más consumidores mexicanos se animan a comprar ropa, zapatos y accesorios en plataformas como Shein, que se ha convertido en un rival para otras marcas de fast fashion, tanto mexicanas como extranjeras.

Tan solo el año pasado, 33.4% de las importaciones de ropa provinieron de China, mientras que 29.6% llegó desde Estados Unidos. Otros países como Bangladesh, Vietnam e India también destacaron como proveedores de ropa para México, aunque con una participación más pequeña. Estas cifras muestran que los mexicanos han encontrado en Asia, y particularmente en plataformas como Shein, una opción práctica y asequible para comprar prendas. 

Foto: Pixabay

Xu Yangtian, un especialista en la optimización de motores de búsqueda, entendió la forma de llamar la atención de los consumidores en el mundo digital y fundó Shein en 2008. El confinamiento global de 2020 le dio un inesperado impulso a su modelo de negocio, que combina las redes sociales con las compras online y un modelo de producción basado en la economía de escalas.

Piratería china, un negocio que afecta a los diseñadores mexicanos

Las compras del fast fashion tienen una desventaja, además de la huella ecológica o el “esclavismo moderno” al que se refiere Profeco por las pésimas condiciones de trabajo que tienen los empleados de las fabricas, pues también afectan los comercios locales o de pequeños empresarios. Tan sólo a principios de noviembre la diseñadora originaria de Chihuahua, Georgina Chávez, se volvió viral en Twitter al denunciar que en AliExpress se estaban robando sus fotos y diseños.

Así denunció el plagio de sus diseños. (Foto: Captura de pantalla)

En entrevista con El Heraldo Digital, la diseñadora explicó que esta es una práctica común de las grandes empresas y que trae una larga lista de retos y problemas como un posible cierre o la falta de credibilidad por parte de los consumidores. Al hablar sobre los mayores riesgos que se presentaron luego que desde la plataforma de ventas por Internet tomaron sus fotos destaca:

  • Piensan que nosotros somos los que estamos robando las fotos
  • Bajan las ventas
  • No se puede competir con ellos
  • Muchas marcas pequeñas tienen que cerrar por el plagio y la piratería

Uno de los mayores retos actuales y que incluso han denunciado otros creadores de diversos productos y que ponen a la venta por Internet, no es sólo que les roben las fotos de los diseños, sino también el concepto en sí y de ahí surge la piratería. Por supuesto, al hablar de un contexto global es poco lo que se puede hacer legalmente para registrar los diseños y reducir el impacto negativo en las firmas o diseños de mujeres artesanas que desde diferentes estados del país también ven sus diesños plagiados por la piratería china

Con información de El Heraldo de México