Redacción
EEUU.- El robot Valkyrie de la NASA se embarca en una nueva misión al otro lado del mundo desde su hogar en el Centro Espacial Johnson de la agencia en Houston.
En virtud de un acuerdo de derecho espacial reembolsable con Woodside Energy en Perth, Australia Occidental, la NASA planea utilizar un robot Valkyrie para desarrollar capacidades de manipulación diestra móvil remota para respaldar la distancia de las instalaciones de energía no tripuladas y en alta mar.
Woodside Energy probará el software resultante y proporcionará datos y comentarios a la NASA, lo que ayudará a acelerar la maduración de la tecnología robótica.
En esta segunda colaboración reembolsable con Woodside, Valkyrie promoverá las capacidades de operaciones robóticas remotas que tienen el potencial de mejorar la eficiencia de las operaciones remotas y en alta mar de Woodside al tiempo que aumenta la seguridad de su personal y el medio ambiente. Además, las nuevas capacidades podrían tener aplicaciones para las misiones Artemis de la NASA y otros objetivos robóticos terrestres.
Los robots móviles controlados a distancia en la superficie lunar y marciana podrían permitir a los operadores con base en la Tierra llevar a cabo actividades importantes, incluso cuando los astronautas no estén físicamente presentes.
Estas actividades incluyen la inspección y el mantenimiento de la infraestructura y las fábricas que extraen recursos y materiales para producir nuevos artículos, lo que permite a los astronautas vivir de la tierra. Las pruebas de Woodside también proporcionarán datos valiosos a los ingenieros de la NASA sobre el uso de robots avanzados en aplicaciones terrestres similares.
“Estamos entusiasmados de comenzar la siguiente fase de desarrollo y prueba de sistemas robóticos avanzados que tienen el potencial de impactar positivamente la vida en la Tierra al permitir operaciones más seguras en entornos peligrosos”, dijo Shaun Azimi, líder del Equipo de Robótica Hábil de NASA Johnson. .
«Estas demostraciones evaluarán el potencial actual de los robots avanzados para extender el alcance humano y ayudar a la humanidad a explorar y trabajar de manera segura en cualquier lugar».
Para entregar el robot, el experto equipo de robótica de la NASA de Johnson viajó a la sede de Woodside en Perth, Australia Occidental. El equipo preparó el robot Valkyrie y realizó una capacitación con el equipo de Woodside sobre sus operaciones.
El trabajo culminó con una visita a funcionarios del gobierno de Australia Occidental y al Cónsul General de EE. UU. en Perth.
Valkyrie y otros robots móviles avanzados pueden ser herramientas esenciales para que los humanos supervisen de forma remota el trabajo peligroso y descarguen tareas aburridas y repetitivas, lo que les permite a los humanos trabajar en tareas de nivel superior, incluida la implementación y el mantenimiento de robots. Estos principios se aplican tanto al espacio como a la Tierra, donde las empresas reconocen el valor de los robots a escala humana.
El uso de robots para mejorar las misiones de Artemis puede ayudar a la humanidad a establecer una presencia a largo plazo en la superficie lunar y, algún día, en otros planetas como Marte. A través de asociaciones comerciales nacionales e internacionales, la NASA está creando la próxima generación de capacidades robóticas a escala humana.
Apoyar el desarrollo de Valkyrie on Earth creará datos y lecciones aprendidas que los equipos de la NASA aplicarán al desarrollo actual y futuro de la robótica y la automatización para su uso en el espacio.
La NASA aplicará el trabajo de desarrollo de software realizado en Valkyrie a futuros lanzamientos de hardware y realizará demostraciones operativas con Woodside como parte de la colaboración reembolsable en 2026-2027 para probar las capacidades del robot en entornos operativos remotos relevantes.
*Información de El Palco.