Redacción
EEUU.- El agente y paramédico del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Nicho las Wingate, cuestionó a sus superiores respecto de las órdenes que ha recibido de negar agua a los migrantes, así como de empujarlos de nuevo al Río Bravo para que regresen a México.
Fue el pasado 3 de julio que Wingate envió un correo bajo el asunto de Registro de evento semanales y preocupaciones operativas, donde relató múltiples incidentes ocurridos la semana previa en el río de la frontera de Texas, y las órdenes que recibieron, calificándolas de de inhumanas.
En el inicio del correo se puede leer que el agente comprende y está de acuerdo que su misión es proteger el borde de malas personas, por ello desea informar al algunos “problemas” a lo que se enfrentaron entre las fechas del 24 de junio al 1 de julio del presente año en Eagle Pass.
Refiere que en su recorrido al rededor del río, encontraron 120 personas acampando, entre ellas había una gran cantidad de niños y bebés; las personas estaban visiblemente cansadas y hambrientas; y al notar este hecho, llamaron al oficial de turno al mando, quien les ordenó empujar a la gente de regreso al agua para que regresaran a México.
Instrucciones ante las cuales el grupo de patrulleros decidió que esta acción no era correcta por el alto riesgo de ahogamiento; al contactar nuevamente al oficial al mando, este les ordenó decirles a los migrantes que volvieran México, y que ellos subieran a sus patrullas y se marcharan.
El 6 de junio, había un grupo cerca del muro buscando refugio; entre ellos, una niña de cuatro años intentó cruzar el alambrado y fue empujada hacia atrás por la Guardia Nacional de Texas; la niña se desmayó por el agotamiento y fuerte calor.
El mismo día, un hombre tenía una visible laceración en una de sus piernas, al cuestionarle qué pasó, este explicó que un niño había quedado atorado en el alambre de un barril que estaba a modo de trampa en el agua; al intentar liberarlo, él se lastimó con la misma trampa; además, un joven de 15 años se rompió la pierna después de quedar enredado mientras caminaba con una parte del alambrado que habían dejado en tierra.
Uno de los casos más desgarradores fue el de una joven de 19 años, atorada en el alambrado; cuando fueron a brindarle ayuda, cortando la malla, notaron que estaba doblada del dolor; pues estaba teniendo un aborto repentino.
Durante el correo se describen más hechos que acontecieron durante estas fechas; al estar el alambrado extendido por áreas donde es fácil cruzar, les obliga a intentarlo por zonas más peligrosas, ya que son profundas y no seguras para pasar con niños.
El 7 de julio recibieron el reporte de una madre y dos niños intentando cruzar con dificultad, un bote fue enviado a recatarlos, sin embargo, solo la madre y unos de los niños fueron encontrados y trasladados al EMS de Eagle Pass, donde fueron declarados muertos; el otro infante nunca volvió a ser visto; en total, 5 personas se ahogaron esa semana en el área.
Además de ello Nicolas Wingate, dice creer en la operación en la que se desempeña, sin embargo, también piensa que las órdenes que han recibido se han vuelto inhumanas; y en los párrafos finales habla de para qué deberían servir las barreras y como ellas están poniendo en riesgo a las personas que intentan cruzar, ya que se han convertido en trampas y no barreras de seguridad.
Una de sus opiniones es que los muros deben de servir para brindar protección y proveer de una manera de viajar segura por tierra, además debe de ser una manera de que las patrullas busquen brindarles protección a las familias que buscan refugio, no lo contrario.
Las barreras no deberían de ser utilizadas como una trampa, por ello deberían de estar iluminadas en la noche y quitar los barriles que no son nada más que una trampa humana colocada en lugares profundos con poca visibilidad.
También dice lo siguiente: “Debemos operar de manera correcta ante los ojos De Dios. Necesitamos reconocer que estas personas están creadas a imagen y semejanza de Dios y debemos tratarlas como tales”
Considera que hay órdenes que deberían de ser quitadas por su calidad inhumana: “La orden de no darle agua a la gente debe de ser revertido de manera inmediata”
Reconoce el peligro a los que son sometidos los migrantes durante su intento de cruzar y cuando son regresados: “También creo que obligar a los refugiados a volver a México contra dejarlos pasar el borde los pone en situaciones de peligro, dejándolos a manos de los Cárteles, quienes pueden volver a cobrarles por cruzarlos nuevamente”.
Es de relevancia mencionar que en México se han dado diversos casos en lo que va del 2023, donde drogan con tranquilizantes a los migrantes, sin que ellos lo sepan, durante su viaje para que puedan “aguantar” el trayecto.
Asimismo, existe la posibilidad si el transportista se encuentra en peligro de ser detenido, de ser abandonados dentro de la caja del tráiler donde viajan sin posibilidad de salir; pues tan solo el 16 de julio pasado, el INM informaba del rescate de 303 personas extrajeras que viajaban dentro de un tráiler y otra unidad móvil, siendo la mayoría familias que viajaban en grupo intentando cruzar a Estados Unidos.
*Con información de Vanguardia.