Armando Guzmán
EEUU.- La premisa es simple; o ganan los militares de Estados Unidos o ganan los cárteles mexicanos.
Por primera vez en la historia el presupuesto militar estadounidense en sus secciones, 1010, 1011, 1012 y 1013 establece las acciones que sus fuerzas militares tomarán contra los productores y los traficantes de drogas, principalmente los que introducen fentanilo desde México.
Lo primero que es necesario aclarar es que esta no es una licencia para invadir a México, para violar su territorio en tierra, mar o cielo ni tampoco es una licencia para intervenir en los asuntos soberanos del estado mexicano. Pero, si es una licencia para combatir a los cárteles mexicanos de la droga.
El miércoles, 6 de diciembre las dos cámaras del congreso en Washington aprobaron en conferencia la nueva ley de gasto militar para el 2024.
Esta ley ya con los específicos será formalizada con un nuevo voto esta misma semana, e inmediatamente después será llevada para la firma del presidente Joe Biden, y con eso, el proyecto se convertirá en ley.
El nuevo presupuesto militar instruye al secretario de Defensa, para que junto con otras agencias federales y en consulta con el gobierno mexicano:
“Realice operaciones de detección, monitoreo y otras operaciones en el ciberespacio para contrarrestar a las organizaciones criminales transnacionales mexicanas que participan en una variedad de actividades que cruzan la frontera sur de Estados Unidos”.
En tres enormes páginas, de la 597 a la 600 del presupuesto militar, el Congreso de Estados Unidos marca las acciones específicas contra los narcos mexicanos, que el Pentágono deberá conducir durante todo el 2024.
Estas partidas son por más de 1,200 millones de dólares. Con esta montaña de dinero, los militares estadounidense deberán planear y llevar a cabo acciones en contra del contrabando de drogas ilegales y sustancias controladas, la trata de personas y el tráfico de armas.
Este presupuesto asigna al Departamento de Defensa como la única agencia estadounidense líder en la detección y monitoreo del tránsito aéreo y marítimo de drogas ilegales hacia Estados Unidos. También expande, la autorización para que los militares lleven a cabo operaciones cibernéticas en contra del trasiego de fentanilo, y de otras drogas sintéticas.
Con esto el congreso extiende a los militares su autoridad para que use la fuerza que sea necesaria…
“Para contrarrestar a las organizaciones criminales transnacionales mexicanas, incluidas las entidades citadas en la Evaluación Nacional de la Amenaza de las Drogas más reciente publicada por la DEA la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos”. (Específicamente esa evaluación señala al Cartel de Sinaloa y al Jalisco Nueva Generación como los objetivos a ser destruidos.)
Esta vez no han sido solamente los legisladores republicanos los que han insistido en terminar con las organizaciones criminales mexicanas, ahora también los demócratas lo apoyan.
La mayoría de los miembros del Congreso llevan mucho tiempo insistiendo en combatir de frente al tráfico de drogas ilícitas. Lo que es distinto ahora, es que México es señalado como el responsable de traer cantidades sin precedentes de fentanilo a Estados Unidos. Los cárteles mexicanos son acusados directamente de provocar una epidemia de muertes por sobredosis.
Los detalles
El Congreso con este presupuesto condiciona al Departamento de Defensa, a someterle a sus dos Comités de los Servicios Armados, en las dos cámaras, dentro de los 60 días siguientes a la promulgación de esta ley; “… Los planes y las estrategias para las operaciones en el ciberespacio de los carteles”.
El presupuesto militar también dispone que haya reuniones informativas trimestrales, para que los militares actualicen a los legisladores sobre las operaciones contra los cárteles, especificando en sus informes a las naciones en las que esas acciones se estén llevando a cabo. Esto implica que no habrá límite de persecución geográfica contra los cárteles.
Esta misma semana el congreso aprobara esta última versión que incluye la compaginada entre las dos cámaras. Eso significa que en los primeros días de marzo, los militares estadounidenses deberán tener ya funcionando una nueva estrategia que incluirá:
Una descripción formal de la presencia cibernética y las actividades (para incluir operaciones de información) de las organizaciones criminales descritas anteriormente.
Especificaciones detalladas sobre cualquier acción cibernética previa adoptada por el Departamento de Defensa de Estados Unidos contra estos grupos. Incluirá también las descripciones adicionales sobre los acuerdos y trabajos de cooperación en materia de seguridad con el gobierno mexicano.
El presupuesto de defensa no da directivas acerca de qué acciones serán tomadas contra los traficantes. Lo que hace es otorgarles a los militares “autoridad legislativa explícita” para que hagan lo que sea necesario en su contra. El lenguaje dice que el secretario de Defensa puede realizar detección, monitoreo y otras operaciones en el ciberespacio para contrarrestar a las organizaciones criminales transnacionales mexicanas.
Las acciones descritas en el presupuesto de defensa no significan que el Pentágono de Estados Unidos, “Necesite darles a los militares nueva legislación de autoridad para actuar”, pero no está por demás tener esa autoridad explícita, para operar sin limitaciones.
La nueva autoridad específica del congreso codifica aún más las funciones del Comando Cibernético de Estados Unidos dentro del gobierno.
“Ojo”, estas acciones claramente no son una aprobación tácita del uso de la fuerza militar estadounidense en contra de los cárteles dentro de México.
Esta acción lo que si hace es formalizar el papel de Cybercom en el monitoreo de las comunicaciones de los grupos del crimen organizado mexicano. A la vez que autoriza las acciones que sean necesarias, en donde sean necesarias, para interrumpir las comunicaciones y las actividades de los cárteles.
Como usted ve esta guerra contra el crimen organizado mexicano será a varios niveles. No es solo enfrentarlos a balazos.
Desde su creación, Cybercom ha sido la punta de lanza cibernética entre las operaciones militares y los esfuerzos de inteligencia. Los comandantes militares de Estados Unidos, compartirán ahora la información que recaben sobre los cárteles, con la Agencia de Seguridad Nacional, que es la responsable de llevar a cabo la inteligencia extranjera. Las dos organizaciones ya ampliaron sus objetivos con respecto a los cárteles.
En Washington se han debatido formas sobre cómo el Departamento de Defensa protege a Estados Unidos en el ámbito digital
Está muy claro que las fuerzas armadas estadounidenses tienen la responsabilidad de defender a Estados Unidos de ataques cibernéticos tanto como si estos fueran misiles. Sin embargo, abordar las amenazas cibernéticas ha sido un problema más complicado, debido a que, en el ámbito cibernético los militares defienden principalmente a las redes del Departamento de Defensa. Ahora con esta nueva autorización, los militares vigilarán también a las redes civiles en donde quiera que sea relevante para su labor contra los cárteles. El objetivo es claro, marcar al dinero producto del narcotráfico y con eso desenmascarar a quienes lo lavan y lo convierten en dinero legal.
Lo que es una interrogante es el grado de dificultad para destruir a los cárteles. Por eso 1,200 millones de dólares que es la cantidad asignada para esta misión es apenas un enganche inicial. Cada año esta capacidad será incrementada.
En la nueva Estrategia de Defensa Nacional las fuerzas armadas tienen prioridad para disuadir conflictos y agresiones importantes por parte de otros países, pero en el 2024 estos objetivos se ampliaron para usar la fuerza necesaria para enfrentar y destruir a los cárteles mexicanos. Lo que hay que subrayar es que otro objetivo es nulificar la conexión de fentanilo entre México y China.
En julio de este año, le adelante en esta columna, que el congreso autorizaría acciones militares contra los cárteles mexicanos y que por segundo año consecutivo aumentaría las peticiones de gasto militar del presidente Joe Biden.
Esto se confirmó con el presupuesto aprobado el pasado miércoles.
Ahora el total del gasto militar de Estados Unidos para el 2024 será de más de 840 mil millones de dólares, la mayor cantidad de dinero jamás usado en la defensa de este país.
Este próximo año, habrá billones de dólares para aumentar la capacidad militar estadounidense que con eso seguirá siendo la más extensa del planeta.
En el nuevo presupuesto de defensa hay asignadas montañas de dinero para el desarrollo de misiles hipersónicos, para la ampliación de la capacidad de formas de lanzar ataques nucleares, para la defensa de ataques nucleares contra territorio estadounidense y habrá dinero también para nuevo armamento que no ha sido visto antes en ningún otro país.
Le menciono todo esto porque es extraordinario que junto con toda esta capacidad ofensiva y de defensa, Estados Unidos ahora incluya el combate a las organizaciones criminales mexicanas. Obviamente los comentarios mexicanos de que esto es solo politiquería electoral se desvanecen ante la realidad.
Estos ya no son discursos de campaña, lo que estamos viendo es la fría realidad. La suerte está echada, y como le dije al principio, o ganan los cárteles o ganan los militares de Estados Unidos.
*Información de El Economista.