Gabriel Soriano
Aguascalientes, Ags. – El acceso a un trabajo digno para las personas con discapacidad sigue siendo muy limitado, según reconoce José Piña Huerta, activista y Coordinador de Cultura de la Discapacidad. Los empresarios aún no están sensibilizados sobre las habilidades de estas personas.
“Los empresarios carecen de confianza en las capacidades de las personas con discapacidad. Además, es importante destacar que muchas personas con discapacidad no se capacitan lo suficiente. Creen que simplemente por tener una discapacidad les van a ofrecer un trabajo, pero eso no es cierto. Deben demostrar primero sus habilidades antes que su discapacidad”, afirmó.
Para lograr un cambio en esta situación, Piña Huerta considera crucial trabajar en colaboración, es decir, tanto los empresarios deben estar dispuestos a contratar a personas con discapacidad como a invertir en su capacitación.
Por supuesto, el papel de la familia es fundamental en el proceso de integración laboral de las personas con discapacidad, ya que son ellos quienes deben fomentar la autonomía de sus miembros con discapacidad.
“Si la familia sobreprotege a las personas con discapacidad, mientras que en los centros de rehabilitación les enseñan a ser independientes, se puede producir un conflicto. Estoy convencido de que para lograr un desarrollo laboral, académico, cultural y social adecuado, la familia debe involucrarse activamente, ya sea que la persona tenga una discapacidad congénita o adquirida”, concluyó.