Gabriel Soriano
Aguascalientes, Ags. – Las reformas al Poder Judicial no son viables, opinó el diputado Salvador Maximiliano Ramírez Hernández, quien señaló que no es adecuado que candidatos a jueces y magistrados realicen campañas prometiendo lo que ya es su obligación, como parte de sus funciones en el poder.
Desde la segunda quincena de agosto, el Poder Judicial de la Federación (PJF) ha iniciado un paro de labores en protesta contra la reforma impulsada por el gobierno federal. El lunes 26 de agosto, trabajadores del estado se manifestaron al respecto.
“Necesitamos buenos árbitros, gente preparada, gente de carrera que imparta justicia tanto a nivel federal como estatal. Esto no es un tema de partidos políticos, es un tema de salvaguardar los derechos y la impartición de justicia a nivel nacional y local”, expresó el diputado, presidente de la Mesa Directiva.
Ramírez Hernández considera que la idea de elegir jueces y magistrados mediante voto popular es compleja y poco viable, ya que estos cargos deben ser ocupados por personas con preparación y carrera judicial. Argumenta que el voto popular podría llevar a una dinámica adversa y contraproducente.
“¿Qué podría prometer un juez o magistrado a un ciudadano en la calle? ¿Menos autos de formal prisión? ¿Más agilidad en los procesos? ¿Una impartición pronta y expedita? Se supone que eso ya es parte de sus funciones. Es preocupante, especialmente en estados donde el estado de derecho podría quedar en segundo plano. Espero que personas sin experiencia o con nexos con el crimen organizado no logren colarse como jueces”, expresó.
El legislador explicó que, según la propuesta, los tres poderes tendrían que proponer dos candidatos, y sería la población quien votara por la terna. En este contexto, no se podría garantizar la imparcialidad, ya que podría haber compromisos políticos hacia algún perfil o partido.
La propuesta deberá ser aprobada por dos terceras partes de los diputados y senadores en sus respectivas cámaras, y posteriormente será turnada a los 32 congresos locales, donde deberá ser aprobada en al menos 21 de ellos.
Ramírez Hernández destacó que habrá que esperar cómo se presenta la propuesta para someterla a debate. En caso de que las reformas sean aprobadas, en Aguascalientes se buscaría hacer una adaptación para mitigar su impacto.