Redacción
El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, fue visto ingresando a Palacio Nacional para reunirse con el presidente Andrés Manuel López Obrador.
La visita se da en un contexto de tensión en Culiacán, donde se reportaron actos violentos vinculados a la presunta detención de Iván Archivaldo Guzmán Salazar, líder de la célula criminal “Los Chapitos”.
Rocha Moya evitó responder a la prensa que aguardaba en las inmediaciones de la sede presidencial, aunque fue insistentemente cuestionado sobre su postura frente a los hechos violentos registrados en Culiacán.
En redes sociales indicaban que la capital sinaloense vivía un ambiente de precaución debido a los rumores sobre la captura del hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Estos informes llevaron a la Secretaría de Seguridad Pública del estado a pedir calma a la ciudadanía y evitar la difusión de información no confirmada.
Antes de ingresar a Palacio Nacional, Rocha Moya aseguró que la situación en Sinaloa estaba bajo control. “Se encontraron una patrulla del Ejército con una camioneta de gente armada, eso fue, pero ya no hay nada. Está tranquilo Sinaloa”, afirmó el mandatario.
Cuestionado sobre si había rendido declaración ante la Fiscalía General de Justicia del Estado, Rocha Moya indicó que aún no lo había hecho, pero que estaría dispuesto a declarar si así se le solicita. “Cuando me llamen, cuando me llamen”, respondió apresuradamente.