Redacción
El Consejo de la Judicatura Federal (CJF) decidió ayer, por mayoría de votos, no atender los amparos que ordenaban frenar la implementación de la reforma judicial impulsada por la Cuarta Transformación.
En una sesión prolongada, los consejeros, por 4 votos contra 3, resolvieron no acatar las suspensiones provisionales emitidas por jueces de distrito, que pretendían congelar temporalmente los actos necesarios para implementar la reforma aprobada el pasado 11 de septiembre.
La presidenta de la Suprema Corte, la ministra Norma Piña, votó en contra de esta decisión, pero fue derrotada por la mayoría conformada por los consejeros Sergio Javier Molina Martínez, Bernardo Bátiz, Verónica De Gyvés Zárate y Celia Maya García, todos cercanos a Morena. Además de Piña, José Alfonso Montalvo Martínez y Lilia Mónica López Benítez se opusieron a ignorar las medidas cautelares.
El CJF también acordó entregar al Senado los listados de jueces y magistrados, para que se convoque a la elección de estos en 2025.
Además, en la misma sesión, el CJF aprobó 26 peticiones de asociaciones de juzgadores que están en paro desde el 19 de agosto, entre ellas, la garantía de que los salarios y prestaciones se mantendrán sin cambios por lo que resta del año.
También se acordó estudiar un programa de retiros voluntarios y analizar la eliminación del requisito de ratificación para acceder a las pensiones complementarias.
Respecto al paro laboral, el CJF se comprometió a no tomar represalias contra los servidores públicos involucrados y a reducir gradualmente las cargas de trabajo acumuladas en los últimos dos meses.