Redacción
El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) estableció medidas regulatorias para Telcel y su subsidiaria Telmex, ambas de América Móvil, propiedad de Carlos Slim, con el fin de proteger los derechos de los usuarios.
Las medidas incluyen el desbloqueo obligatorio de equipos, la eliminación de plazos forzosos en contratos y restricciones en la recuperación de clientes por portabilidad.
A partir de ahora, todos los equipos deberán venderse desbloqueados para permitir al usuario cambiar de compañía sin necesidad de solicitar la liberación del dispositivo. Además, se prohibirá a Telcel establecer plazos forzosos en los contratos, facilitando la libertad de cambio de operador en cualquier momento.
Para proteger la decisión de portabilidad, Telcel no podrá contactar a usuarios que hayan cambiado de proveedor durante un plazo de 60 días. Estas regulaciones aplican a usuarios individuales, dejando fuera a clientes corporativos.