Redacción
Tras casi tres años de preparación, Citigroup concretó la separación de sus operaciones bancarias en México en dos entidades: Citi México, enfocada en clientes institucionales, y Banamex, que continuará atendiendo el segmento minorista. La decisión forma parte de una estrategia global de Citigroup para salir del negocio minorista en varios países y centrarse en grandes corporativos.
El siguiente paso será la venta de Banamex a través de una Oferta Pública Inicial (OPI) en el mercado de valores, un proceso que inició en enero de 2022. “Citi continúa trabajando activamente en la propuesta de OPI de Grupo Financiero Banamex, cuyo calendario dependerá de las aprobaciones regulatorias y las condiciones del mercado para maximizar el valor para los accionistas”, señaló Citigroup en un comunicado.
Manuel Romo, director general de Grupo Financiero Banamex, aseguró que no habrá recortes de personal tras la separación y destacó que incluso se han contratado más empleados para garantizar la calidad del servicio durante la transición. “Tenemos dos equipos de administración separados, dos equipos tecnológicos separados y hemos reforzado nuestra plantilla para atender cualquier duda de los clientes”, afirmó en entrevista.
Ambas instituciones financieras cuentan con una sólida capitalización, según Romo, lo que garantiza su estabilidad y capacidad para operar de manera independiente. “La vocación de atención a los segmentos que cada banco tiene va a continuar”, añadió.
La venta de Banamex mediante la OPI dependerá de las condiciones del mercado y de la aprobación de las autoridades regulatorias. Este movimiento busca maximizar el valor para los accionistas y asegurar que Banamex pueda seguir consolidándose como un actor clave en el sector financiero mexicano.