BBC Mundo
Freetown.- Las casas en la zona de Regent, cerca de la capital Freetown, quedaron completamente destruidas.
Una avalancha de lodo y piedras ocurrida en la madrugada del lunes cerca de la capital de Sierra Leona, Freetown, dejó al menos 300 muertos y alrededor de 3.000 damnificados.
Las fuertes lluvias fueron la causa de la avalancha ocurrida en la montaña Sugar Loaf (Pan de Azúcar), en el distrito de Regent, en las afueras de Freetown.
El deslizamiento tuvo lugar a las seis de la mañana hora local (06:00 GMT), cuando la mayoría de las víctimas todavía dormían.
Las autoridades temen que aumente el número de muertos.
El deslave ocurrió a las seis de la mañana, hora local del lunes.
Los equipos de rescate están retomando la búsqueda desesperada de supervivientes en la mañana de este martes, pues la operación tuvo que suspenderse temporalmente en la noche.
Las autoridades temen que con el paso de las horas aumente el número de fallecidos.
El presidente del país, Ernest Bai Koroma, pidió calma e instó a los residentes de Freetown a que se mantengan alejados de las áreas afectadas.
La mayor parte de la gente estaba dormida cuando ocurrió el deslave.
En un mensaje transmitido por televisión, el mandatario afirmó que se ha establecido un centro para responder a la emergencia para lidiar con lo que llamó una tragedia nacional.
El vicepresidente, Víctor Bockarie Foh, detalló que la zona tuvo que ser acordonada durante la evacuación y que se teme que todavía queden muchos atrapados en sus hogares.
Casas sepultadas
Un vocero de la Cruz Roja, Abubakarr Tarawallie, dijo a la BBC que al menos 100 propiedades habían quedado sumergidas por el lodo y que algunas se habían derrumbado a causa del colapso de una sección de la montaña Sugar Loaf.
Los equipos de emergencia buscan supervivientes.
Agregó que los voluntarios y el personal de la organización estaban participando en operaciones de búsqueda y rescate, y que las personas afectadas necesitaban refugio y mantas.
Los residentes de la zona trataron de recuperar cuerpos de los escombros y el barro con sus propias manos.
Un funcionario de Sierra Leona encargado de la gestión de desastres, Candy Rogers, afirmó que “más de 2.000 personas están sin hogar” como resultado del deslizamiento de tierra, informó AFP.
Rogers aseguró que se requerirá un enorme esfuerzo humanitario para hacer frente a las consecuencias de las inundaciones.
La gente está llorando desconsoladamente. Una mujer me dijo que había perdido a más de 11 familiares en el desastre, mientras que otro hombre había perdido a su esposa, suegra e hijos.
No queda nada de las casas que ocupaban la montaña.
Cientos de personas siguen viniendo a la zona para buscar a sus seres queridos. Algunos de ellos me dijeron que no han podido encontrarlos.
De hecho, no hay ninguna señal de las decenas de casas que fueron construidas al pie de la montaña Sugar Loaf.
Están cubiertas de barro, con grandes áreas de fango en algunas partes. Parece sólida, pero es escamosa. La preocupación es que si la gente camina por ahí, corren el riesgo de hundirse en el barro.
Cientos de personas siguen llegando a la zona en busca de sus seres queridos.
En 2005 también hubo inundaciones con graves consecuencias.
Las inundaciones no son inusuales en Sierra Leona, donde las inseguras viviendas ubicadas en asentamientos improvisados pueden ser barridas en caso de fuertes lluvias.
Las precipitaciones a menudo afectan a Freetown y sus alrededores, una ciudad costera con más de un millón de personas.
En 2015, Freetown vivió fuertes inundaciones provocadas por las lluvias monzónicas, que mataron a diez personas y dejaron a miles de personas sin hogar.