Alemania acelera su rearme ante la amenaza rusa y la incertidumbre de EE.UU.

Redacción

Los estruendos de misiles y explosiones retumban en Münster, pero los lugareños apenas los notan. La base militar cercana ha sido escenario de intensos ejercicios militares, reflejo de una transformación que Alemania ya no puede aplazar.

El Bundeswehr, las fuerzas armadas alemanas, recibió vía libre para ampliar su presupuesto tras la decisión parlamentaria de eximir el gasto militar de las restricciones de deuda. El general Carsten Breuer, el militar de mayor rango en el país, justifica la medida con una advertencia clara: “Estamos amenazados por Rusia. Estamos amenazados por Putin”.

Breuer sostiene que la OTAN debe estar lista para un posible ataque en un plazo de cuatro años. “No se trata de cuánto tiempo necesito, sino de cuánto tiempo nos va a dar Putin para prepararnos”, afirma.

Un giro en la política alemana

La invasión rusa a Ucrania modificó la postura de Alemania, históricamente renuente a fortalecer su poderío militar debido a su pasado en las dos guerras mundiales. La excanciller Angela Merkel apostó por la diplomacia y las relaciones comerciales con Rusia, pero la agresión en Ucrania desmoronó esa estrategia.

El canciller Olaf Scholz anunció en 2022 un “Zeitenwende” (punto de inflexión), con una asignación de 100 mil millones de euros para reforzar la Bundeswehr. Sin embargo, Breuer insiste en que esa cantidad apenas cubrió necesidades urgentes.

“Rusia ha invertido enormemente en armamento y tecnología, y opera con una estrategia híbrida que va desde ataques cibernéticos hasta sabotajes”, advierte el general.

Infraestructura militar insuficiente

Un informe reciente al Parlamento expuso las carencias del ejército alemán: falta de municiones, cuarteles deteriorados y un déficit de soldados. La comisionada de las Fuerzas Armadas, Eva Högl, estimó que se necesitan al menos 72 mil millones de dólares solo para mejoras en instalaciones.

El Parlamento aprobó eliminar el límite de endeudamiento para la defensa, una medida impulsada por Friedrich Merz antes de que la nueva legislatura—con una izquierda antimilitarista y una extrema derecha simpatizante de Rusia—pudiera bloquearla.

Cambio en la sociedad

El 79% de los alemanes considera a Putin una amenaza para la seguridad europea, según una encuesta de YouGov. Sin embargo, el 74% también desconfía de Donald Trump, lo que refuerza la incertidumbre sobre el respaldo militar de EE.UU.

Charlotte Kreft, una joven de 18 años, admite que su visión pacifista ha cambiado. “Pensábamos que la mejor forma de resarcir el pasado era desmilitarizarnos, pero ahora debemos luchar por nuestra democracia y nuestra libertad”.

Faltan soldados

El Bundeswehr enfrenta dificultades para reclutar tropas. Un pequeño centro en Berlín intenta atraer interesados, pero la meta de alcanzar 203 mil efectivos sigue lejana.

El general Breuer sostiene que Alemania necesita 100 mil soldados adicionales y presiona para reinstaurar el servicio militar obligatorio. “No hay otra forma de lograrlo”, enfatiza.

Durante una reunión en un ayuntamiento, lanzó una pregunta directa: “¿Están listos para la guerra?”. Cuando una mujer respondió que la asustaba, replicó: “No soy yo quien te asusta, es el otro tipo”.

Se refería a Putin.

Con información de: BBC