Francisco Espinosa
Aguascalientes, Ags.- Enrique Juárez Ramírez, presidente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), calificó como un curso propedéutico el primer año de gestión del gobernador, Martín Orozco Sandoval, “quien le entregó un documento al Congreso que difícilmente podríamos llamar un informe detallado del ejercicio de su administración”.
Irónico, felicitó al gobernante por declarar que ahora sí se va a poner a trabajar, a partir del próximo año. “Esto confirma que se siente todavía en campaña y que no se da por enterado que ya es gobernador (…) como dice su propio slogan: ahora sí vemos en la dirigencia del PRI cuestiones preocupantes”, dijo.
Detallando, recordó que ahora sí se pagan cuotas escolares, “a pesar de que en tiempos de campaña prometió eliminarlas de tajo. Cuando asumió el cargo se dio cuenta que no era sencillo asumir el costo que aportaban para mantener a los institutos; como prometió lo imposible, y para no quedar mal, hizo un programa para apoyar a las familias, aceptando que no pudo cumplir”.
En el mismo sector educativo, el priista lamentó que la otorgación de becas escolares haya disminuido en un 30% respecto a la gestión anterior. “Nuestros estudiantes más necesitados de nivel básico, medio y medio superior vieron como pasaron de más de 18 mil becas entregadas a 12, 310, según cifras que el propio gobernador especifica”, subrayó, argumentando que si un solo año se perdieron 6 mil, no imaginaba lo que sería al final del sexenio.
Lamentó que la inseguridad se haya disparado en el estado, mostrando nostalgia por el ambiente seguro que antes había. “Ahora sí nos invade el temor cuando retiramos dinero del cajero automático, por la vuelta de las ejecuciones, por los robos en nuestras casas. Ahora sí está gobernando la inseguridad”, comentó, recordando que Aguascalientes se encuentra en la lista de entidades en alerta según el Observatorio Nacional Ciudadano y el Semáforo Delictivo.
Por último, dejó claro que el PRI no deberá ni aceptará el estado actual de Aguascalientes. “Por eso nos sumamos a la exigencia de la sociedad: ¡ya basta! Sin excusas ni pretextos, esto debe de parar porque no merecemos volver a vivir el temor”, concluyó.