Redacción
De enero a septiembre de este año, Tabasco registró 647 homicidios, un incremento del 155.7% respecto a los 253 reportados en todo 2022, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP). Esta cifra revela un notable incremento en los casos de homicidio bajo la administración actual del gobernador Javier May, quien asumió el cargo tras la salida de Carlos Manuel Merino, ambos miembros de Morena.
El aumento en los homicidios contrasta con la tendencia descendente que había caracterizado los últimos años en la entidad. En 2019, cuando Adán Augusto López, actual senador, ocupaba la gubernatura, se contabilizaron 670 homicidios. A partir de ese año, la cifra fue en descenso: 604 en 2020, 451 en 2021 y 328 en 2022.
Adán Augusto López dejó la gubernatura en agosto de 2021 para integrarse al gabinete federal, siendo reemplazado por Merino, quien concluyó su mandato en septiembre de este año con el registro más bajo de homicidios en 2022. Sin embargo, en lo que va de 2023, las cifras han vuelto a repuntar, acumulando 647 víctimas de homicidio en los primeros nueve meses.