Gabriel Soriano
Aguascalientes, Ags.- Valeria, quien fue encontrada sin vida junto con sus dos hijos, pudo haber seguido con vida si las autoridades hubieran atendido los reportes de amenazas por parte de su expareja y de haber atendido con oportunidad los reportes de desaparición.
El sábado 7 de diciembre fueron encontrados los cuerpos de Citlali Valeria Ávila Dávalos, de 20 años, y de sus hijos, Neithan Yahel y Jonathan Alexander, de uno y cuatro años, respectivamente, quienes habían sido reportados como desaparecidos el 6 de noviembre.
Mariana Ávila Montejano, coordinadora del Observatorio de Violencia Social y de Género (OVSGA), detalló que Valeria, cuatro meses antes de su desaparición, había denunciado que su expareja estaba amenazándola tras su separación. Desapareció el 23 de octubre; el 26, sus familiares tuvieron el primer acercamiento con las autoridades para su búsqueda y fue ahí cuando se emitió la primera alerta ALBA, aunque sin tener respuesta por parte de las autoridades. El 6 de noviembre, la familia se acercó a la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas de Aguascalientes y fue ahí cuando se retomaron las investigaciones, donde dieron con el domicilio al que su expareja acudía regularmente y donde fue encontrada Valeria.
Señaló que la finca en donde presuntamente se mantuvo cautiva a Valeria había sido tapada completamente por el municipio, solo dejando la puerta de acceso, razón por la que considera que esto sirvió como insonorizante, lo que dificultó que los vecinos escucharan algún lamento.
Bajo este contexto, Ávila Montejano consideró que, si las autoridades hubieran actuado con oportunidad tanto atendiendo la primera denuncia de Valeria como los primeros reportes de desaparición, Valeria podría seguir con vida.
“Todos esos días, desde el reporte de desaparición, tuvo la autoridad, las diferentes autoridades, para haberlos localizado y decidieron no hacerlo porque le dijeron a su familia que posiblemente se había ido con otro, que se había ido con alguien, y eso nos lo dijo la propia familia; la fiscalía especializada en búsqueda de personas desaparecidas en Aguascalientes les dijo, esperen porque quizá están con alguien”, declaró.
Reiteró que hace cuatro meses se hubiera podido evitar el deceso de ella y sus dos hijos, pues ya había solicitado la intervención de la autoridad ante amenazas, pero no se le dio seguimiento. Este no es el único caso en el que las autoridades son omisas a las denuncias de las víctimas, lo que podría haber evitado futuros conflictos.
“Estamos sí ante autoridades violentas, y lo decimos, aunque nos juzguen, autoridades feminicidas, porque criminalizan a las mujeres, responsabilizan a las mujeres, las estigmatizan. Los responsables son quienes no cumplieron su cometido de garantizar una vida libre de violencia para ella y para sus hijos, que no le dieron alternativa a pesar de que ella había dicho que estaba siendo perseguida por su expareja”, denunció.
Aunque reconoció que ya se tienen propuestas integradas para atender esta problemática, como la atención de violencia de género en las líneas de emergencia, afirmó que en la mayoría de las llamadas no se les da un seguimiento adecuado.