Redacción
En medio del reciente estreno de la adaptación cinematográfica de “Romper El Círculo”, el best-seller de Colleen Hoover, la actriz Blake Lively se encuentra en el centro de una polémica que ha generado un intenso debate.
La cinta, que aborda la violencia de género y los traumas derivados de las relaciones abusivas, ha recaudado más de 200 millones de dólares en taquilla, pero su éxito ha sido opacado por críticas y controversias en torno a la actitud de Lively durante la promoción del proyecto.
Desde que se anunció la participación de Lively en la película, la actriz ha sido señalada por los fanáticos del libro por comentarios que algunos han catalogado como frívolos.
Uno de los gestos que más revuelo ha causado es su decisión de vestir únicamente prendas con estampados florales en un guiño a su personaje, Lily Bloom, propietaria de una floristería en la historia.
Este detalle, aunque aparentemente inocente, ha sido interpretado por algunos como un intento de desviar la atención del tema central de la película: la violencia de género.
La situación se complicó aún más cuando Lively reveló un comentario de Justin Baldoni, director, productor y coprotagonista de la película.
Según Lively, Baldoni le preguntó sobre su peso antes de una escena en la que debía levantarla, un comentario que la actriz interpretó como una forma de “fatshaming”.
Esta revelación ha alimentado los rumores sobre tensiones entre ambos durante la producción y promoción del filme, especialmente considerando que el elenco ha evitado promocionar la película de manera conjunta.
A lo largo de este proceso, Blake Lively también ha sido criticada por aprovechar el estreno de “Romper El Círculo” para lanzar su nueva línea de productos para el cuidado del cabello, un movimiento que muchos han calificado de insensible, dada la gravedad del tema que aborda la película.
En contraste, Baldoni ha mantenido un perfil más bajo, centrando su promoción en la lucha contra la violencia de género, lo que ha contribuido a la percepción de que ambos actores tienen enfoques muy diferentes respecto al proyecto.
Ante esta ola de críticas, Lively ha buscado refugio en su amiga Taylor Swift, quien tiene experiencia lidiando con crisis de reputación. Según fuentes cercanas a la actriz, Swift ha estado asesorando a Lively sobre cómo manejar la situación, recordándole las lecciones que ha aprendido tras años de enfrentarse a la opinión pública.