Redacción
Ninguna empresa afiliada a la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) ni a la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) tiene adeudos pendientes con los transportistas que el lunes bloquearon las autopistas México-Pachuca y México-Querétaro, aseguraron ambas organizaciones.
Luis Méndez Jaled, presidente de la CMIC, señaló que, aunque tienen conocimiento de la protesta realizada por transportistas que exigían pagos relacionados con servicios prestados en la construcción del tramo 2 del Tren Maya, no hay reportes de adeudos por parte de sus afiliados.
“No tenemos en el escritorio datos de adeudos de constructores. Yo siempre he pedido que nos hagan saber para trabajar de cerca con nuestra representación y la gestión de esta cámara”, afirmó Méndez Jaled.
Los bloqueos del lunes fueron liderados por transportistas, algunos de ellos afiliados a la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM), quienes reclamaron deudas por servicios como el transporte de material de construcción. Según los manifestantes, los adeudos rondan los 100 mil pesos por trabajador.
Este martes, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo aseguró que el gobierno federal no tiene deudas con los trabajadores del Tren Maya y explicó que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), responsable de la obra, ya había iniciado los pagos a las empresas contratadas para que estas liquidaran a los transportistas.
Por su parte, Méndez Jaled reiteró que las empresas afiliadas a la CMIC no reportan conflictos de este tipo y aseguró que, si llegaran a detectarse, se atenderían con transparencia. “El día que lo tenga [un reporte de adeudo] y me lo permita el constructor, puedo decir, se le debe tanto y tanto”, precisó.
La Canacar también negó tener registro de problemas de este tipo entre sus miembros.
Aunque no es la primera vez que trabajadores del Tren Maya denuncian retrasos en pagos, como ocurrió en junio con un adeudo de 90 millones de pesos a proveedores de roca basáltica, las cámaras industriales destacaron que estos casos no involucran a sus agremiados.
Los transportistas insistieron en que sus reclamos están dirigidos a empresas privadas subcontratadas para la construcción del tramo 2 del Tren Maya, mientras el gobierno y las cámaras continúan negando cualquier irregularidad en los pagos.