Terra
CDMX.- Desde una galaxia muy, muy lejana, llegan a la Tierra ondas misteriosas de radio, y por fin, científicos neerlandeses han detectado por primera vez de dónde provienen estas réplicas de explosiones de radio rápido, un tipo de “flash” de ondas de radio de corta duración.
Estas ondas, conocidas como FRBs, son visibles sólo por una fracción de segundo y han atraído la curiosidad de los astrónomos por más de una década.
La única manera de detectarlas es combinando varios telescopios de radio que estén separados por grandes distancias, lo que permite imágenes de buena resolución cuando se intersectan sus avistamientos.
El equipo de investigación estuvo integrado por científicos de la Universidad de Ámsterdam, el Instituto de los Países Bajos de Radioastronomía y la Universidad de Leiden.
Los astrónomos se apoyaron en el Observatorio Arecibo, en Puerto Rico, y la red europea VLBI, que relaciona telescopios alrededor del mundo para localizar la posición precisa de donde viene la onda de radio: una galaxia enana a 3 mil millones de años luz de la Tierra.
“Con este nivel de precisión, tenemos evidencia sólida de que la fuente de las explosiones está físicamente relacionada con lo que sea que produce esta persistente emisión de radio”, señaló en un comunicado Benito Marcote, uno de los investigadores del grupo.
El equipo utilizó uno de los telescopios ópticos más grandes del mundo, el Observatorio Gemini, en Hawai, para detectar los estallidos que originaban las ondas radiales.
Al equipo investigador le asombró que el origen se hallara en una galaxia tan pequeña: “No estábamos seguros de qué esperar, pero creo que todo el equipo estaba sorprendido de que nuestra fuente exótica está hospedada en una galaxia diminuta y apenas visible”, apuntó Cees Bassa, coautor del estudio.
Los científicos creen que la localización de donde provienen las ondas es vital para entender su naturaleza física, pues las galaxias pequeñas contienen gas mucho más prístino comparado con el que se encuentra en la Vía Láctea.
“Las condiciones de esta galaxia enana hacen posible la formación de estrellas masivas, más que en la Vía Láctea, y tal vez la fuente de las explosiones de FRBs son el remanente colapsado de estas estrellas”, explicó el científico Jason Hassels.
Otra teoría del origen de estas ondas misteriosas es su cercanía con un hoyo negro que trague el gas circundante.
El próximo paso de los investigadores será usar los telescopios para medir la periodicidad de la llegada de las ondas; en caso de que se hallara un tempo, tendrían evidencia de que es una estrella la que produce el fenómeno.