Redacción
Aguascalientes, Ags.-El combate a los delitos de alto impacto es una constante desde esta administración de la Fiscalía General del Estado que 24/7 trabaja incansable con el afán de garantizar la procuración de justicia para las víctimas de los hechos punibles; a través de este comunicado, se rinden resultados respecto del emprendimiento de un proceso penal en contra de una persona del sexo masculino, señalado por probablemente incurrir en las conductas típicas de Privación Ilegal de la Libertad, Violación y Contra la Salud en la modalidad de posesión simple, quien permanecerá en prisión preventiva de carácter oficioso.
Para lograr el objetivo planteado derivado de la captura del sujeto que responde al nombre de Alfonso N N, el Representante Social se allegó de importantes datos de prueba recopilados en colaboración con sus compañeros integrantes de la Trilogía de la Investigación, quienes, desde sus especialidades fortalecieron las pesquisas, estableciendo la siguiente construcción de hipótesis de los acontecimientos:
Era el día primero de noviembre del presente año, cuando el reloj marcaba las 00:30 horas; el imputado se encontraba con la víctima del sexo femenino en la segunda planta de un domicilio ubicado en el fraccionamiento Hacienda San Marcos.
Todo transcurría con aparente normalidad; ella sostenía su teléfono móvil de la marca Oppo en color azul, contestando algunos mensajes; de pronto, Alfonso le arrebató de entre las manos su teléfono móvil y lo revisó.
Al ver algo que no le agradó, el sujeto se tornó en extremo violento y la insultó severamente, amagando con golpearla si no acataba las instrucciones que él le indicaría.
Ante la amenaza de una agresión física, la mujer decidió retirarse del sitio, por lo que descendió a la primera planta de la vivienda, sin embargo, mientras lo hacía, el imputado la inmovilizó lanzándole un pesado cobertor en la cabeza, para obligarla a regresar, refiriéndole que, si no volvía, la golpearía, mientras que sostenía el celular.
La mujer salió del domicilio con la intención de escapar, sin embargo, debido a que el sujeto contaba con un bien de su propiedad, la mujer decidió regresar.
Cuando ambos se encontraban en el inmueble, el sujeto cerró la puerta, bloqueando su uso con un pesado objeto metálico, al tiempo que le decía a la fémina que realizara de inmediato labores domésticas, puesto que no le permitiría salir nunca más y, de no hacerlo, él le mostraría sus alcances.
A partir de ese momento, la fémina perdió su libertad deambulatoria, siendo sometida por el hombre, quien tomó un cable para atarle las manos.
Transcurrieron algunos minutos y él se distrajo, por lo que la ofendida intentó escapar, realizando las acciones necesarias para abrir la puerta; lo que fue inútil ya que el hombre frustró la acción y continuó con ofensas verbales en su contra, además de amenazar con privarla de la vida.
Cuando cayó la noche, el sueño vencía a la mujer, quien, al ver que estaba en peligro, prefirió acatar las órdenes del sujeto e intentar tranquilizarse, por lo que se fue a dormir a una cama que se encontraba en una de las habitaciones.
Mientras dormía se percató que el sujeto tenía la intención de sostener relaciones sexuales, a lo que ella se negó rotundamente, sin embargo, fue obligada por él, consumando el delito de violación.
A la mañana siguiente la mujer despertó y de inmediato le cuestionó al hombre si ya la dejaría salir, respondiendo afirmativamente, momento en el que la mujer recuperó su libertad.
Tras sentirse vulnerada en su integridad, la fémina acudió ante el Ministerio Público para narrarle a detalle el suceso, lo que derivó en el inicio de un protocolo de investigación con perspectiva de género, con la intención de subsanar cada una de sus afecciones como víctima.
Fue así como los intervinientes en la indagatoria se coordinaron para la realización de las actuaciones correspondientes, lo que derivó en que la Unidad Especializada en Combate al Secuestro (UECS) obtuviera tras diversos registros de investigación, una orden de cateo en el domicilio del sujeto con la intención de localizar indicios suficientes para acreditar científicamente el suceso.
El mandamiento judicial se autorizó por parte del togado, lo que derivó en la implementación de un operativo para cumplimentar el cometido.
Al acudir al lugar, los elementos de la Comisaría General de la Policía de Investigación, se coordinaron para la notificación e ingreso al domicilio ubicado en el condominio Hacienda Molinos del fraccionamiento señalado con anterioridad.
Con el registro cada una de las habitaciones del sitio, se percataron de la presencia de narcótico, conocido como cristal, distribuido en diversos contenedores, indicios que, a la vista, superaba por mucho la cantidad para consumo personal.
Cuando se detectó la droga en la vivienda, se procedió al aseguramiento de Alfonso, a quien ya esperaban en la Agencia del Ministerio Público designado con la investigación previa en su contra por las conductas probablemente ejercidas en agravio de la víctima.
En adición a las pesquisas, los químicos de Investigación Pericial analizaron el indicio localizado determinando que la sustancia encontrada corresponde a clorhidrato de metanfetamina, con un peso neto total de 18585.5 miligramos, equivalente a 464 dosis.
Se realizaron las diligencias necesarias, lo que derivó en la audiencia inicial en la que se imputó a Alfonso por posiblemente incurrir en los hechos delictivos de Privación Ilegal de la Libertad, Violación y Contra la Salud en la modalidad de posesión simple, por los que permanecerá en prisión, en espera del plazo de dos meses para el cierre de la investigación complementaria.