Gilberto Valadez
Aguascalientes, Ags.- Las inundaciones al interior del nuevo paso a desnivel al norte de esta ciudad, que generaron numerosas reacciones en redes sociales, vienen a sumarse a las deficiencias con que se ha laborado en proyectos de obra pública en el actual gobierno panista de Aguascalientes.
A estas burlas que ha provocado esta obra, debe añadirse, en contraparte, la polémica en torno al derribo de árboles en esa zona, la falta de claridad en torno al proyecto de un libramiento carretero y hasta deficiencias en el Hospital Hidalgo inaugurado a finales del año pasado.
Todo, a menos de dos años de la actual gestión estatal.
Adiós a los árboles
Para el comienzo de 2018, el gobernador panista Martín Orozco Sandoval anunció la construcción simultánea de dos pasos a desnivel en igual número de arterias de amplia circulación vial. Uno de ellos en el cruce de la avenidas Aguascalientes y Guadalupe González, a un costado de la Universidad Autónoma; mientras el segundo quedaría ubicado en la zona residencial de la ciudad, en la avenida que conduce al municipio conurbano de Jesús María.
Ambos proyectos generaron críticas debido a que ocasionaría el derribo de árboles en los camellos de dichas avenidas. Esto fue minimizado por Jesús Altamira Acosta, Secretario de Obras Públicas, quien descartó una reforestación por los trabajos.
“De nada sirve hacer una reposición de árboles: 100, 500 o mil cuando a final de cuentas la supervivencia es menos del 20 por ciento, mueren entre el 80 y el 90 por ciento. Es un tema que esta administración no lo vamos a hacer”, dijo.
El proyecto fue cuestionado hasta los propios panistas. El 25 de enero, la legisladora del PAN, Norma Zamora, pidió la comparencia del Secretario de Obras Públicas del Estado para explicar el proyecto de la construcción de los dos pasos a desnivel.
Oficialmente, se derribaron 288 árboles de las zonas donde se construyeron estos puentes, aunque la cantidad exacta es motivo de debates.
Las cascadas del puente
Fue el pasado 23 de enero de 2017, durante la presentación del proyecto de pasos a desnivel, cuando el propio Martín Orozco aseguró que estas concluirían en cuatro meses. “Les damos hasta el 31 de mayo”, dijo ante los asistentes al banderazo de la obra.
En realidad, el puente a un costado de la Universidad fue abierto a la circulación hasta inicios de agosto y solamente a medias, pues los trabajos en realidad no concluyen en su totalidad y la circulación vial continua tomando rutas alternas.
Sólo que el puente ya fue exhibido a nivel nacional cuando a través de Internet se viralizó un video donde tras las intensas lluvias del pasado miércoles, se puede apreciar como se filtra el agua al interior de la obra e inundando el pavimento para la circulación de autos.
Frente a ello, Altamira Acosta tuvo que salir a dar la cara en diversas entrevistas para aclarar que el puente “aún no estaba terminado” y que la filtración de agua no ponía en riesgo la construcción que según datos oficiales tuvo una inversión de 110 millones de pesos.
El eterno libramiento
Pero no es la única polémica en cuanto a obras públicas vinculada con el gobierno estatal. Es el caso de la construcción de un libramiento carretero para transporte pesado que rodee la zona metropolitana de la ciudad; un proyecto que cada administración ha llegado a citar al menos una vez.
El propio Martín Orozco ha llegado a dar banderazos de salida para su arranque. El 28 de marzo de 2017, anunció que el proyecto de libramiento comenzaría en junio de ese año, en la zona poniente de la ciudad y con una inversión de 1,400 millones de pesos.
No obstante, continuaría alargándose.
A las dudas en torno al proyecto se unió de manera involuntaria el secretario Jesús Altamira, quien el 25 de abril del año pasado en una entrevista colectiva no pudo recordar el nombre de la empresa privada a la cual el gobierno le cedería en concesión del libramiento carretero.
– ¿Entonces no recuerda el nombre de la concesionaria?
– No recuerdo ahorita.
A finales del 2017, el secretario de Gestión Urbanística y Ordenamiento Territorial, Armando Roque Cruz, achacó temas políticos el freno en el avance del libramiento. “Es un libramiento que fue concesionado hace dos administraciones a un grupo de empresarios para ejecutar su terminación. Lamentablemente ya son ocho años de esa situación que no se ha podido desarrollar. Son cuestiones algo técnicas, pero más bien políticas”, dijo entonces.
Finalmente, parecía que el plan avanzaba cuando se confirmó que sería dado a la firma privada Concesionaria de Autopistas. Pero ante la falta de claridad, el gobierno panista decidió revocar la concesión a inicios de este mes de agosto. La administración de Martín Orozco justificó “incumplimiento de obligaciones”.
Por ahora, el proyecto de libramiento carretero sigue en veremos.
Goteras en el hospital
El 14 de diciembre de 2017, Martín Orozco encabezó el inicio de operaciones en el nuevo Hospital Hidalgo: un proyecto que fue iniciado hace casi una década, pero que nunca pudo ser concluido por las administraciones previas de Luis Armando Reynoso y Carlos Lozano.
El proyecto lucía prometedor a futuro, pero no tardó en mostrar carencias. En días pasados, se dio a conocer en medios locales que el nosocomio padece de goteras por las lluvias y fallas en su infraestructura.
Asimismo, se reveló que había mal funcionamiento en algunas puertas y que personal médico carecía de los espacios personales para cumplir con su labor.
Todo a menos de un año de la apertura de un hospital cuyos trabajos, como el libramiento y el puente vial en Universidad, parecen eternos.