Redacción
Una práctica ha surgido recientemente: el uso de bolas de aluminio en el congelador. Esta tendencia está ganando popularidad por los beneficios que ofrece, y aquí te explicamos para qué sirve y cuál es su sustento científico.
Según Komefy, una aplicación y sitio web especializada en la reducción del desperdicio de alimentos en restaurantes y distribuidoras, colocar bolas de papel aluminio en el refrigerador o el congelador puede tener varios beneficios significativos:
1. Mantiene la temperatura constante: El papel aluminio actúa como un estabilizador térmico dentro del refrigerador, ayudando a mantener una temperatura constante que permite que los alimentos se conserven en mejores condiciones por más tiempo.
2. Evita la formación de hielo: Las bolas de aluminio pueden prevenir la acumulación de hielo en las paredes del congelador, facilitando su limpieza y mantenimiento.
3. Elimina el “sabor a refri”: A menudo, los alimentos almacenados en la nevera adquieren un sabor u olor desagradable. Las bolas de aluminio pueden ayudar a evitar que esto suceda, mejorando la frescura de los productos.
Para aprovechar estos beneficios, Komefy sugiere dos métodos sencillos:
– Método de las bolitas: Consiste en hacer bolitas de papel aluminio y colocarlas en cada esquina del congelador. Esto ayuda a mantener los alimentos congelados sin la presencia de humedad.
– Método de forrado: Consiste en forrar las paredes del congelador con hojas de papel aluminio. Antes de hacerlo, es necesario desconectar el refrigerador y asegurarse de que el congelador esté libre de hielo. Este método puede prevenir la acumulación excesiva de hielo y humedad.