Francisco Espinosa
Aguascalientes, Ags.- Antes de una jornada maratónica en el congreso donde se discutirían 42 puntos de acuerdo, el Partido Acción Nacional (PAN) quiso protegerse de lo que se prevé un ataque a fuego abierto desde el recinto legislativo que aún cuenta con mayoría priista.
Del cúmulo de asuntos a discutir, los diputados tienen agendados dos que jalan todas las miradas: el desafuero a funcionarios y la sanción al alcalde Juan Antonio Martín del Campo, encargo de los tribunales electorales quienes lo encontraron culpable de intervenir en el proceso electoral pasado desde sus funcionales como encargado del ayuntamiento capital.
Ante esta realidad, el priismo sacó sus más filosas cartas para castigar al presidente municipal. Sin mucho empacho y como una revancha política de la derrota sufrida en las urnas, los legisladores del tricolor apuntaron fuerte: inhabilitación por dos años y la destitución inmediata de su cargo.
El castigo, severo y contundente, despertó el ímpetu panista provocando una rueda de prensa matutina en la que se prometió que estarían todos los diputados electos de su bancada para la próxima legislatura, aunque no fue el caso.
Sin más, Paulo Martínez López, presidente estatal del PAN, recalcó que la medida, además de ser anticonstitucional, “es una clara muestra del dolor que tienen porque les ganamos la elección; es un mandato de su candidata perdedora que ya está viendo quién se lo paga”. Añadió que los diputados priistas no tienen una calidad moral para intentar imponer una sanción como la que plantean, “y que además es excesiva”.
Les recordó a los legisladores priistas que en 2015, durante el proceso electoral en el distrito uno, “hubo una intromisión directa del gobernador con su autobús y con la serie de mensajes en medios de comunicación, y solo hubo una sanción pública. Ahora, al alcalde lo quieren crucificar cuando lo único que hizo fue atender a algunos medios; no están midiendo con la misma vara”.
Les dejó claro que en su afán de perjudicar al PAN, “lo único que están haciendo es fortaleciéndonos. Nos iremos a los tribunales y les apuesto que ganaremos. Los exhibiremos porque no tiene un equipo jurídico profesional”. Precisó que si bien Martín de Campo no les ha externado sus intenciones políticas en un futuro inmediato, “en el partido lo vemos como un activo y liderazgo notable. Una carrera política no acaba con un ayuntamiento”.
Respecto al desafuero a funcionarios, que claramente apunta a Martín Orozco Sandoval, gobernador electo del estado y que tiene un proceso legal pendiente, Martínez López lamentó que el PRI vuelva a violar los estatutos de ley “porque pretenden legislar con el hígado (…) nosotros estamos a favor pero que se elimine desde su origen: la constitución federal. No podemos hacer reformas con parches en cada parte del país”.
Les recordó que hace no mucho, al mismo PRI le faltó un solo voto para aprobar esta medida “y que ahora sigue infringiendo el proceso legislativo porque no se puede abordar en este periodo extraordinario, tal como lo establece el artículo 67 de la ley orgánica del estado que dice que las iniciativas no aprobadas y votadas en el pleno no podrán volver a presentarse sino hasta el próximo periodo ordinario”. Lamentó que el tricolor legisle de acuerdo a sus necesidades.
Señaló que es una medida hecha por el PRI y no por el diputado de Movimiento Ciudadano, Oswaldo Rodríguez, quien la presentó. “Se votará en abstención y en contra porque no se puede abordar en un periodo extraordinario. Si se aprobara, analizaremos el presentar el un recurso para intentar revocarlo”.