Nueva York. Al Pacino fue considerado muy bajo, a Marlon Brando se le exigió una prueba en cámara y el director Francis Ford Coppola casi fue despedido.
En la reunión por el aniversario 45 del filme el sábado en Nueva York, el director y el elenco de El Padrino recordaron las pruebas, la perseverancia y la inspiración que resultaron en las películas sobre la mafia que ganaron el Oscar.
Coppola, Pacino, Robert De Niro, Diane Keaton, James Caan, Talia Shire y Robert Duvall presenciaron proyecciones consecutivas de El Padrino (1972) y El Padrino: Parte 2 (1974) junto a una audiencia de 6 mil personas en la noche de cierre del Festival de Cine de Tribeca.
“No he visto estas películas en años”, dijo Coppola. “Me pareció una experiencia muy emotiva. Olvidé muchas cosas sobre la filmación y pensé sobre la historia, y la historia utilizó muchas cosas personales y de familia”, agregó.
Los dos películas, que cuentan la historia de cómo un huérfano de Sicilia emigra a Estados Unidos a comienzos del Siglo XX y forma a la familia criminal Corleone, ganaron nueve premios Oscar y se convirtieron en clásicos del cine.
Sin embargo, el filme tuvo un difícil comienzo. Coppola recordó que el estudio Paramount de Hollywood quería ambientar la historia en la década de 1970 y hacer algo “barato y rápido”.
Coppola casi fue despedido en varias oportunidades y enfrentó una dura resistencia por la decisión de escoger a Pacino para que interpretara a Michael Corleone y a Brando como el padrino.
Brando, quien murió en 2004, había participado de varios fracasos de taquilla luego de una carrera estelar en la década de 1950 y tenía la reputación de ser alguien complicado.
“Me dijeron (ejecutivos del estudio) que tener a Brando en la película la volvería menos comercial que tener a un total desconocido”, comentó Coppola.
El estudio posteriormente accedió “si Marlon hace una prueba en cámara sin pago y presenta una garantía de un millón de dólares de que no provocará problemas durante la producción”, agregó.