Gabriel Soriano
Aguascalientes, Ags.- En al menos nueve escuelas se ha detectado que personas intentan robar o hacer mal uso del recurso otorgado a través del programa La Escuela Es Nuestra. Todos los casos ya han sido judicializados, informó la titular de la Secretaría del Bienestar, Silvia Licón Dávila.
Al cierre de la administración de Andrés Manuel López Obrador, la delegación de Aguascalientes ha recibido 347.5 millones de pesos para el programa La Escuela Es Nuestra, beneficiando a 841 planteles distribuidos entre los once municipios.
Dicho recurso se utiliza principalmente en infraestructura, y son los mismos padres de familia quienes deciden en qué se aplica. En estos planteles han mejorado o construido aulas, cambiado baños, puesto planchas de cemento en los patios, pintado, construido bardas perimetrales, invertido en comedores, en dispensadores de agua o en equipo electrónico para mejorar la educación de los menores.
Licón Dávila explicó que la distribución de estos recursos se realiza mediante un comité de padres de familia quienes, junto con el director, identifican las necesidades del plantel para así invertir lo entregado por el programa, que va desde los 250 hasta 600 mil pesos. Funcionarios de la Secretaría del Bienestar no pueden decidir cómo se aplica el recurso ni a quién se contrata para hacerlo.
“Se han llevado a cabo muy buenos trabajos con este programa, pero sí debo decirles que hay personas que luego quieren tomar un dinero que no les corresponde. No son muchos casos. De las 841 escuelas beneficiadas, son como 9 o 10 casos, y son del municipio de Aguascalientes”, informó la delegada.
Especificó que la propia Secretaría de Bienestar no puede presentar una denuncia al no ser los afectados directos, sino que es el mismo comité quien tiene que presentar las denuncias ante la fiscalía.
Afirmó que estos casos de robo ya fueron denunciados y se han judicializado, por lo que la Secretaría del Bienestar está dispuesta a colaborar en lo que necesiten.
En cuanto a las afectaciones, estimó que “no llega ni al millón porque no creas que se roban todo, va de 100 mil pesos, 30 mil. Es poco el recurso, pero finalmente está afectando a los niños”, dijo.
Lo que sí revisan los supervisores es que el recurso entregado se aplique correctamente, es decir, que el valor de la obra sea coherente con lo entregado.