Francisco Espinosa
Aguascalientes, Ags.- En noviembre de 2006, un mes después de que tomara protesta como presidente de México, Felipe Calderón Calderón se visitó de militar y se tomó una foto ante 4500 soldados en una base militar.
En aquel entonces, el panista tenía miedo de que las protestas de Andrés Manuel López Obrador -debido a los resultados adversos- y los cabildeos entre algunos empresarios de peso en el país –incluido Carlos Slim-, impidieran que su administración arrancase.
Para evitar cualquier postergación, uso al Ejército y a la Marina –a los cuales les aumentó el presupuesto y les dio facultades nunca antes vistas-, dando inicio a la conocida “guerra contra el narco” que dejaría un saldo 100 mil muertes violenta y miles más de personas desaparecidas. Desde ese momento, la relación entre el expresidente Calderón Hinojosa y Carlos Slim se alejó sin que se pudieses remediar por completo al paso del tiempo durante su mandato, a pesar de intentos de diversos personajes.
Diego Enrique Osorno, periodista, narra este hecho –apoyado por diversas fuentes- en su libro Slim: biografía política del mexicano más rico del mundo (Debate, 2016), que le llevo ocho años de investigación y varios acercamientos con el magnate. Más allá de su indiscutible acercamiento a la izquierda, documentado en sus charlas con Fidel Castro, Cristina Fernández y el mismo Andrés Manuel López Obrador, fue la inestabilidad política lo que provocó que Slim, previo a la elección presidencial de 2006, convocará al ‘Pacto de Chapultepc’ a diversos empresarios, desde el mismo castillo emblemático de la Ciudad de México.
Además, Osorno cuenta que paradójicamente, la relación entre Calderón y Slim mejoró un poco al finalizar el periodo presidencial del panista. Sin embargo, a pesar de que en lo privado hablaba con molestia del político, el magnate mexicano nunca dejó de acudir a los eventos que era convocado por presidencia, ni crítico públicamente al mandatario.
Debido a su trabajo cercano con López Obrador durante su etapa como jefe de gobierno del Distrito Federal, muchos aseguraban que había sido Slim y no el perredista el verdadero derrotado en las elecciones de 2006. Sin embargo, un año después, el magnate fue posicionado por primera vez en su vida como el hombre más rico del mundo, según la revista Forbes. Hasta la fecha, a pesar del testimonio de varios invitados al Pacto de Chapultepec, el empresario mexicano niega la intención de llevar a cabo tal reunión: “es una tontería”, insiste.