Francisco Espinosa
Aguascalientes, Ags.- Minutos antes del mediodía, en el segundo patio de palacio de gobierno, un grupo de mujeres permanecían sentadas frente a un escenario dispuesto para Carlos Lozano, gobernador del estado, así como para Rosario Robles, Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), quien tuvo una jornada ajetreada en Aguascalientes supervisando los trabajos del programa “Ciudades Seguras para Mujeres” realizados al nororiente de la ciudad.
El evento en el palacio gubernamental estaba programado para las 13 horas. Una hora antes, mujeres provenientes de dicha zona comenzaron a llenar las sillas puestas en el segundo patio, donde de a poco comenzaba a haber movimiento. Cinco minutos antes de la una, se les fue notificado a los reporteros de la fuente de gobierno sobre un retraso de media hora en la agenda del gobernador. Nadie le avisó a los asistentes.
A las 13:30 horas, tras 90 minutos de estar sentadas, quien hace la presentación de los eventos del gobernador, tomó el micrófono anunciando que la presencia del mandatario estatal y de la titular de la SEDATU estaba a punto de llegar. Con paciencia, el público relajó un poco el gesto de inconformidad y se acomodó otra vez en las sillas. Sin embargo, a la “tercera llamada”, la desesperación ganó la contienda.
Alrededor de 40 mujeres se levantaron de sus asientos y emprendieron el camino hacia la puerta del palacio de gobierno con el ceño de enfado y fatigadas por la espera. Entonces, a las 14 horas, tras dos horas de esperar a las autoridades, trabajadores de gobierno fueron detrás de las inconformes para pedirles que regresaran a su sitio. Convencidas, lo hicieron con alguna mala gana mientras Lozano de la Torre y Robles arribaban al recinto.
Minutos después, Rosario Robles pidió disculpas por el retraso, argumentando que durante el recorrido previo que hicieron por la zona, decidieron observar a detalle “las caras de agradecimiento que hace semanas era de malestar”.
