Redacción
Existen determinados hábitos que ayudan a fortalecer la salud de la memoria. Sin embargo, algunos hábitos también puede ser especialmente perjudiciales para esta función cerebral, a pesar del desconocimiento de la población.
Los trastornos del sueño o no dormir lo suficiente puede tener problemas a largo plazo para la memoria. Así lo han constatado diferentes trabajos de investigación.
En este sentido, desde ‘MedlinePlus‘, explican que «cuando no duerme lo suficiente (privación del sueño), puede sentirse cansado y afectar su rendimiento, incluyendo su capacidad de pensar con claridad, reaccionar rápidamente y formar recuerdos».
Insomnio y afectación a la memoria
Un estudio de la Universidad Complutense de Madrid asegura que las alteraciones cognitivas y los problemas de memoria son algunos de los síntomas más habituales de personas que presentan insomnio crónico. Además, sugieren que estos signos son más palpables en personas que duermen menos de seis horas al día.
Diferentes trabajos de investigación han observado como las personas con trastornos del sueño como el insomnio crónico, presentan alteraciones leves a niveles cognitivos que pueden tener efecto en la memoria.
Según indican los investigadores de la Universidad Complutense de Madrid argumentan que «estas alteraciones pueden comprobarse con pruebas neuropsicológicas, aunque en todos los pacientes no son lo suficientemente intensas para afectar significativamente a su vida cotidiana».
Por otra parte, una investigación de la Escuela de Medicina de Harvard señala que las personas que duermen menos de siete horas por la noche ven reducida sus habilidades cognitivas, memoria, razonamiento o resolución de problemas.
Factores que influyen en los trastornos del sueño
En el desarrollo normal del sueño intervienen factores biológicos y psicosociales. Además, los investigadores de la Complutense de Madrid argumentan que «las personas con tendencia a interiorizar las emociones, perfeccionistas y que presentan un aumento de activación psicofisiológica en situaciones estresantes son más propensas a sufrir insomnio».
Si bien la presencia de determinados factores psicosociales también intervienen en la aparición de los trastornos del sueño. Y es que no descansar adecuadamente durante un largo periodo de tiempo puede hacer mella en la salud de la memoria y otras funciones cognitivas.
En este sentido, un reciente estudio publicado en la revista ‘Sleep‘ y elaborado por realizada por el Laboratorio de Sueño y Aprendizaje de la Universidad Estatal de Michigan (Estados Unidos), determina que las siestas cortas no ayudan a paliar los efectos de una noche de insomnio.
Como conclusión determinan que las siestas no deben sustituir en ningún caso a dormir por la noche, ni siquiera aquellas que cuentan con periodos de NREM.
Igualmente, algunos estudios indican que la mala calidad del sueño puede ocasionar alteraciones en el estado de ánimo, aumentando el riesgo de depresión o ansiedad. Es cierto que la depresión puede originarse por diferentes factores, pero un trastorno del sueño como el insomnio puede ser tanto causa como consecuencia de una depresión.
En definitiva, dormir adecuadamente es fundamental para el bienestar general del organismo, para nuestro estado de ánimo y también para preservar diferentes funciones cognitivas como la memoria, aprendizaje y concentración.
Con información de Todo Disca