Redacción
Brasil.-El brasileño Joao Pereira de Souza es una persona jubilada que hace cinco años salvó la vida a “Dimdim”, un ejemplar de pingüino de Magallanes, y a raíz de ese sucedo, ambos han forjado una de las historias de lealtad y amistad más enternecedoras.
Pereira encontró a Dimdim cubierto de petróleo en 2011, y si no hubiera sido por su rápida actuación y los cuidados que pudo brindarle durante una semana, Dimdim hubiera muerto en las rocas de aquella playa.
Joao consideró, luego de unos días, que su amigo ya estaba recuperado, y lejos de tenerlo en cautivero (hecho que le provocaría una pronta muerte), lo devolvió al mar.
Al cabo de unos meses, llegó la sorpresa y recompensa para Joao: vio a Dimdim regresar a la playa donde ambos compartieron la extraordinaria historia de rescate y supervivencia.
En el video aparece el hombre señalando que el pingüino regresa cada cierto tiempo “a su casa”: viaja desde Argentina aproximadamente 8 mil kilómetros para ver, exclusivamente, a quien lo rescató. Además, señala el brasileño que es el único humano que puede tocar a Dimdim, e incluso lo besa y acaricia.
El jubilado afirma además que siempre que vuelve un menú especial para que retome fuerzas a su regreso. “Lo quiero como si fuera mi hijo y creo que él también me quiere”, dijo a Globo TV el protagonista de una historia digna de cuento.
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