La Silla Rota
Ciudad de México.- A través de un video publicado en su perfil de Facebook el pasado 11 de diciembre, Omar Vázquez Arellano, hermano de uno de los estudiantes fallecidos durante los enfrentamientos en Iguala la noche del 27 de septiembre de 2014, aceptó que tanto Narciso Vázquez Arellano, como algunos otros de los perecidos, trabajaban para la organización criminal de “Los Rojos”.
En el clip, el también vocero del movimiento de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, señala que es debido a la falta de oportunidades que jóvenes como su hermano, se alistan a la filas del crimen organizado, lo cual no es exclusivo de Guerrero, sino de todo el país.
Sobre el tema, Vázquez indica: “lo que pasa en Guerrero sucede en muchos lugares. También los jóvenes, a falta de trabajo, se alquilan para trabajar en las tierras en cultivos de amapola, eso no es un secreto para nadie”.
Y continúa: “Guerrero es el primer productor de amapola; entonces, en ese transcurso de que mi hermano y muchos jóvenes del lugar se fueron a alquilar durante algún tiempo los trasladaron a otro pueblo y en el camino los emboscaron, seguramente un grupo rival. Los que murieron nada tenían que ver con el negocio, eran simples peones, un delito probablemente”.
Las investigaciones de las autoridades identificaron a Narciso como escolta de Margarito Álvarez Bahena, integrante de Los Rojos.
A pesar de reconocer que algunos de los involucrados en el enfrentamiento del 2014 son “peones” de la organizaciones criminales, el el vocero vuelve a negar que Narciso haya formado parte de “Los Rojos”, pues de acuerdo a su opinión, dicha versión ha sido forzada tanto por las autoridades federales como por los medios de comunicación.
“Por mi hermano me han querido vincular con el crimen organizado. Los medios de comunicación, la PGR han forzado la versión. A Sidronio Casarrubias le han hecho declarar que mi hermano pertenecía a ‘Los Rojos’, y no, jamás nos dejaron investigar”.
No obstante, Omar vuelve a insinuar que Narciso y los otros jóvenes eran integrantes de algún cártel, al preguntar: “qué sería más crimen, trabajar de ese modo para sobrevivir o alterar la justicia. Hay que poner en la balanza si realmente todas las personas asesinadas son más culpables que las autoridades corruptas”.
Sin embargo vuelve a negar los vínculos de los normalistas con las organizaciones criminales.
“Mi hermano cuando murió traía sus huarachitos de correa cruzada; los narcos en Guerrero, en las comunidades, son los más presumidos: cargan botas, sus cinturones bien chingones, sus camionetas. No pudo haber sido narco mi carnal, es una víctima más de la guerra. No quería hablar de esto nunca, pero no tengo miedo”, expone.
Cabe destacar que en diferentes ocasiones, Omar ha falseado sus declaraciones, pues ante la PGR dijo llamarse Manuel, mientras que en entrevistas con medios de comunicación, se presentado como Omar García yOmar Salgado Bahena.