Redacción
Ciudad de México.-El fenómeno de la Lady Pays o Lady Sándwich ya trascendió no solo al grado de ser una figura del internet o mini corporativo de ventas, sino que es ya una moda vender diferentes tipos de comida en los cruceros bajo ese seudónimo.
La característica que comparten entre las “Ladys” es que son mujeres jóvenes que realizan esta modalidad de comercio a los automovilistas para generar un ingreso y salir adelante.
Además de los ejemplos más famosos en redes sociales, existe también la Lady Jugos y las Lady’s Tacos.
Esta última consta de dos mujeres emprendedoras que recientemente abrieron su página de Facebook y comenzaron a viralizarse en redes, al anunciarse vendiendo tacos de harina en el cruce de avenida México y Carretera a Reynosa en Guadalupe, Nuevo León.
Hasta el momento, este perfil supera los 350 me gusta y 486 seguidores, y cuenta con algunas publicaciones de promoción de los tacos.
En cuanto al número de seguidores, le sigue Lady Jugos, una mujer llamada Selena que vende de los Jugos Los Weros en el cruce de avenida Sendero Divisorio y Morenita Mía en Escobedo, y con un reconocimiento en redes de mil 100 likes y mil 400 seguidores.
El caso de Lady Sándwich, consta de una joven apasionada del ejercicio y la vida fitness, lo cual refleja en los lonches saludables que ella ofrece en los cruceros en el municipio de Guadalupe, principalmente en la avenida Eloy Cavazos.
Su alcance en redes sociales llegó a las 13 mil me gusta en Facebook y 47 mil seguidores.
Pero el nombre más reconocido es el de Sandra García o Lady Pays, pues su viralización llegó al grado de que ya ha colaborado con varias influencers y ofrecido empleo a otras chicas, con un total de 43 mil likes y 334 mil seguidores, Lady Pays continúa vendiendo en la avenida México en Guadalupe a través de su cada vez más grande empresa.
Por medio de redes también piden apoyar a emprendedoras como Sarahy de 21 años o Lady Tunas, proveniente del Estado de México, quien vende tunas también en el crucero de Sendero Divisorio y Morenita Mía todas las tardes.
Con información de Excélsior